Punto Noticias.- La socióloga e investigadora, María Arboleda, dio detalles históricos sobre la figura de Julio César Trujillo. Ella repasó la vida política del personaje desde los tiempos de las dictaduras en Ecuador.
En algunos espacios, como las redes sociales, hubo cuestionamientos a Trujillo por «los pactos» que tuvo con cierta clase política. Arboleda, ante esos señalamientos, dijo que «hay que hacer una lectura correcta de los momentos y escenarios políticos». A continuación, ella hizo un recuento histórico.
Los antecedentes que se dieron para el pacto entre el CFP (Concentración de Fuerzas Populares) y lo que fue la Democracia Popular obedece a las dictaduras que vivía Ecuador. En el 67, Trujillo ya participaba en la Asamblea Constituyente de la época y, posteriormente, comenzó a luchar contra las dictaduras existentes.
Arboleda recordó que para el retorno a la democracia apareció una nueva cimiente política. Este retorno democrático significó, inclusive, negociar con sectores militares para asegurar un tránsito pacífico. En ese tránsito, Trujillo y otros relevantes personajes de la época, propusieron la opción por la nueva constitución.
En ese entonces, prosigue, estaba la opción de la vieja constitución donde se encontraban figuras como León Febres Cordero. Esa era una propuesta «más de derecha y oligárquica», muy distinta a la nueva propuesta que era liderada por los llamados sectores de centroizquierda. «Y ahí estaba Julio César Trujillo».
Por otra parte, Trujillo y otros personales crearon la Democracia Popular, distanciándose del partido conservador tradicional de derecha. Trujillo lideró un «conservadurismo progresista» y se unió con Democracia Cristiana para dar vida a la Democracia Popular.
LA ALIANZA CFP Y ASSAD BUCARAM
Retomando, la opción de la nueva constitución ganó y permitió que se abra un escenario de elecciones. «En todo sufragio, el tema son los votos» reflexionó Arboleda. Entonces, el populista Assad Bucaram tenía masas y se tomó la decisión de forjar una alianza. «Esa alianza difícil va dando peso a un nuevo liderazgo que aparece en el CFP, que es uno de los presidentes que honramos aún: Jaime Roldós».
Arboleda agregó que entre fines de los 60 hasta los 80, Trujillo tuvo una trayectoria «progresista». Él fue un hombre de matriz católica, «pero no creyente de rituales, sino creyente de la doctrina más viva de la Iglesia». Es decir, Trujillo fue creyente de la opción preferencial por los pobres.
Posteriormente, Julio César Trujillo se desafilió de la Democracia Popular (DP). «Él llegó a un profundo desencanto de la DP, es mi lectura. Él rompe porque considera que ese partido se derechizó». En los años 90 aparece y crece el movimiento indígena, los barrios, las mujeres, los ecologistas.
En el 97, Trujillo se integró a Pachakutik y bajo ese movimiento participó en la Asamblea Constitucional. «Es decir, él ya hace una opción política mucho más hacia la izquierda». El Pachakutik de entonces venía del 90 con la Marcha Indígena, dijo Arboleda. «Entonces, hacer la opción por Pachakutik a fines de los noventa realmente requería, para un hombre que viene de la matriz de derecha, mucha valentía».
Pero, eso nos revela también que él comprendió las tesis políticas de transformación profunda que habían detrás, indicó.
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