«Cuando vinieron los señores ministros yo no sé ni como vinieron, yo no los llamé. A mí me dijeron vacúnenlos», se escucha al director del Hospital Pablo Arturo Suárez.
Punto Noticias.- Un audio de 15 minutos, en el que se escucha al que sería Pedro Molina, director del Hospital Pablo Arturo Suárez; al gerente de este hospital, Diego Tello; y a Gabriela Gómez, exasesora del exministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, revela que sí se ocultó información de los ministros, funcionarios del gobierno y personas favorecidas con la vacuna contra el coronavirus.
De acuerdo con la conversación entre los involucrados, tras el pedido de la Contraloría General del Estado sobre el cronograma y demás información respecto al proceso de vacunación, Gómez da la orden de no revelar los nombres de los ministros que fueron vacunados.
«Nos están preguntando cosas como los cronogramas. Nosotros no hemos dicho nada de que aquí han venido ministros ni nada», expresa Molina y consulta a Gómez si dan o no esta información a lo que ella responde:
«No, porque los exámenes especiales que hace la Contraloría solo pueden ser en base a un contrato o a un convenio».
El audio revelado por el medio digital La Posta sería de hace un mes atrás, en este, los involucrados señalan de la existencia de firmas desde el Centro de Salud de Chimbacalle y del Hospital de los Valles; establecimientos en los que se vacunaron a personas como Rodrigo Paz, Diego Oquendo, Jaime Durán Barba o la madre y la suegra de Zevallos.
Mientras que sobre los siete ministros vacunados (5 de ellos aún en funciones), el director del Pablo Arturo Suárez indica:
«Yo quería enviarles un informe basado en la solicitud que ustedes me hicieron de vacunar a esa gente, porque cuando vinieron los señores ministros yo no sé ni como vinieron, yo no los llamé. A mí me dijeron vacúnenlos. Quien coordinó todo eso no fuimos nosotros».
En esta conversación, el funcionario aclara: «por órdenes verbales de ustedes, yo hice lo que hice». Además, reclama que no tuvo documentos para aplicar las vacunas a los funcionarios, por lo que, incluso, movilizó recursos del Estado, sin un documento legal que lo autorice.
Por su parte, la exasesora de Zevallos indica que la orden de vacunar a los ministros vino desde la Presidencia de la República.
Por otro lado, los involucrados resaltan que hay un vial, es decir 6 dosis de la vacuna, del que no se conoce su destino. Estas habrían sido aplicadas en Carondelet a funcionarios de la Presidencia y, según Gómez, la vicepresidenta, María Alejandra Muñoz, tiene conocimiento del tema.
«Eso, entiendo, ya conoce la vicepresidenta y le va a decir al presidente».
De esta manera, Gómez indica que gestionará los documentos requeridos por parte de Molina y Tello, ya que son ellos «los designados para vacunar a esas personas».
Otro dato curioso que se destaca en la conversación entre los tres funcionarios, es que Pedro Molina habría estado en contacto directamente con Freddy Miño, ayudante de la silla de Moreno, quien también fue vacunado. Esto se evidencia en las declaraciones de Gabriela Gómez, quien señala:
«Yo en Presidencia no me meto, Pedro, porque tú hablabas directamente con Freddy Miño, incluso».
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Fuente: La Posta