El sector eléctrico ruega para que comience a llover -con más frecuencia- en las zonas donde están las principales hidroeléctricas del país. Actualmente, la recuperación de los embalses del Complejo Paute es lenta.
La crisis eléctrica sigue latente y no parece tener solución en el corto plazo.
Las exportaciones de energía de Colombia -en promedio- de 440 megavatios por día; la producción de Coca Codo Sinclair, los cortes de luz de ocho horas diarias y las esporádicas lluvias en las zonas de los embalses no están ayudando a cubrir la demanda nacional de electricidad.
A eso se suma los atrasos y problemas en las contrataciones para comprar y alquilar energía termoeléctrica por parte de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec). Según la planificación del Gobierno, recién a mediados de diciembre y a inicios de 2025 empezarían a producir energía estos nuevos generadores y motores termoeléctricos.
Por eso, el Gobierno se ve en la necesidad de seguir encendiendo el Complejo Hidroeléctrico Paute, de 1.757 megavatios, ocasionando que sus embalses no se recuperen completamente y, apenas, estén por arriba de los niveles mínimos.
De hecho, la Celec tomó -días atrás- la decisión de apagar al Complejo Paute, pero le ha tocado encender por horas -especialmente en las tardes y madrugada- para evitar que los apagones sean más prolongados
Dentro del Complejo Paute están:
- La central hidroeléctrica Mazar, de 170 megavatios.
- La central hidroeléctrica Paute – Molino, de 1.100 megavatios.
- Y, Sopladora, de 487 megavatios.
Asimismo, Celec también apagó la hidroeléctrica Minas San Francisco, de 270 megavatios en su objetivo de recuperar su embalse.
Embalses del Complejo Paute
Con corte a las 11:00 de este miércoles 20, esta es la situación de los embalses de las hidroeléctricas de la zona austral, al sur del país:
Mazar
El nivel del embalse de Mazar está por arriba del umbral de los 2.110 metros sobre el nivel del mar. Al momento ese nivel llega a 2.111,16 metros.
Es decir, solo se recuperó 84 centímetros en los últimos cinco días, pese a que la hidroeléctrica estuvo apagada prácticamente todo ese tiempo.
Según el Operador Nacional de Electricidad (Cenace), si el embalse llega a 2.110 metros se perdería el control de la central, lo que podría desembocar en apagones más severos.
Cabe señalar que Mazar es clave para el funcionamiento del resto de hidroeléctricas, pues, desde allí, se distribuye agua para el resto de embalses.
Amaluza: Paute-Molino
El nivel del embalse Amaluza, que entrega agua a la hidroeléctrica Paute – Molino, alcanza los 1.981,6 metros sobre el nivel del mar. Es decir, en los últimos cinco días solo se ha recuperado 87 centímetros, debido a que la central ha sido encendida solo por horas en los últimos días.
Por ejemplo, el martes 19 fue encendida entre las 12:00 y las 20:00; mientras que este miércoles comenzó a producir 153 megavatios hora desde las 11:00.
El nivel mínimo de ese embalse es de 1.975 metros, es decir, solo está a un poco más de 6 metros de llegar al límite.
Sopladora
Y, el embalse para Sopladora alcanza los 1.315 metros. Desde el sábado hasta las 11:00 de este miércoles ha caído 8 centímetros. El nivel mínimo del embalse es de 1.312 metros.
Esta caída obedece a que fue encendida en horas clave, donde se registra más demanda de energía.
Por ejemplo, este martes estuvo encendida desde las 12:00 hasta las 20:00. Y, este miércoles, volvió a encenderse desde las 11:00, produciendo 84 megavatios hora.
La situación en estos embalses obedece a la falta de lluvias y a la falta de planificación del Gobierno para enfrentar una crisis eléctrica, la cual había sido alertada en diciembre de 2023.
La falta de lluvias tampoco ayudan a recuperar el embalse de la Hidroeléctrica Minas San Francisco, ubicada entre las provincias de Azuay y El Oro.
Con corte a las 11:00 de este martes 19, el embalse alcanzaba los 783,56 metros, es decir, está 23 centímetros por arriba de la cota mínima.