2.632 diligencias y 155 allanamientos ha realizado, a nivel del país, la Fuerza de Tarea.
Punto Noticias. Fiscalía General detuvo, hasta el momento, a 55 personas que cometieron actos de corrupción durante la emergencia sanitaria, según la información oficial proporcionada por el organismo.
Las investigaciones sobre estos hechos ilegales son llevadas a cabo por el equipo de la Fuerza de Tarea, que se conformó luego de que se detectó una serie de tramas ilegales en la compra de insumos y medicinas, para afrontar el coronavirus.
De los 196 casos abiertos, solo 13 han superado la primera fase de la indagación y en este momento se encuentran en instrucción fiscal. El resto se halla bajo reserva.
La Fuerza de Tarea ha realizado 2.632 diligencias y 155 allanamientos, a escala nacional, la mayoría en Pichincha, Guayas, Chimborazo, Cotopaxi, Manabí. Las acciones no han parado, de tal manera que este jueves, por ejemplo, un equipo de Fiscalía ingresó al Hospital de Monte Sinaí, en Guayaquil, al área financiera, para retirar el contrato original relacionado con la compra de insumos médicos.
Estas diligencias forman parte de la indagación que se encuentra en curso, por la adquisición de jeringas, agujas, catéteres, electrodos, cánulas y equipos para cirugía, por los que se pagaron USD 500.000, según datos oficiales.
La fiscal general, Diana Salazar declaró que, durante el estado de emergencia, gran cantidad de casos de corrupción en hospitales y centros de salud empezaron a ser denunciados. “La corrupción es un fenómeno estructural, que afecta a los principios esenciales de la democracia y del Estado de derecho, pues profundiza la desigualdad social, inequidad y pobreza”, señaló, durante un seminario internacional.
Para Salazar, un problema es que solamente el 20 % de procesados por peculado, cohecho, concusión, tráfico de influencias o enriquecimiento ilícito recibe prisión preventiva. Para la mayoría, los jueces disponen medidas sustitutivas, como prohibición de salida del país, uso de grillete electrónico o presentación física ante una autoridad, que permite la fuga, sostuvo.
Fuente: El Comercio, FGE.