Varios expertos aseveran que existen irregularidades en la forma en que las autoridades catalogaron las muertes.
A la cifra de 404 muertos por masacres carcelarias que se reportaron en trece masacres carcelarias, entre 2021 y 2022, en Ecuador; ahora se suman 402 fallecidos en el mismo período, que perdieron la vida por presuntas causas relacionadas a la “violencia intracarcelaria y el suicidio”.
Unas cifras que dan como resultado un total de 806 muertes en la población carcelaria, y que el Gobierno de Guillermo Lasso evita mencionar.
¿Por qué las cifras son tan altas?
El Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI) decidió cambiar la denominación de estos hechos violentos y las calificó como violencia intracarcelaria o simples riñas.
Un claro ejemplo de esto se dio en la Cárcel 1 de Santo Domingo, donde se produjo la muerte de 13 víctimas, el pasado 18 de julio de 2022, y la institución las catalogó como riñas.
El cambio de denominación hace que, en lugar de prevenir las muertes, las autoridades ya no alerten de masacres, sino que manejen los hechos como riñas, o evento aislados, y estos no trasciendan a la opinión pública.
Algo que Kléber Carrión, exdirector de la prisión de Santo Domingo, criticó. Además, indicó que el problema real no ha subsanado, pues existe falta de apoyo desde el Gobierno Nacional.
“De las muertes en las cárceles solo se habla cuando ocurre otro hecho que los pone en vergüenza”.
Sin embargo, otro tema que también preocupa al interior de las cárceles son los suicidios y su falta de prevención; ya que, en los dos últimos años, hubo 68 muertes.
Varios decesos fueron cuestionados, debido a que se suscitaron en modalidad “colectiva”; esto quiere decir que, al hallarse más de un cuerpo colgado, las autoridades carcelarias deciden no investigar y cerrar el caso como suicidio.
Por ello, Pablo Jiménez, presidente de la Asociación Ecuatoriana de Psiquiatría Núcleo Pichincha, instó al Gobierno nacional a mejorar la atención de salud mental en este 2023, con el fin de enfocarse en la reinserción futura de los reos.
Redacción: Ángel Cóndor