Todos los pulgueros tienen grandes expectativas para esta temporada navideña. Desde semanas atrás hacen propaganda en sus redes sociales e invitan a la gente a visitarlos.
En Quito se ha vuelto común encontrar locales y ferias de “pulgueros”, esto por la calidad y precios de los productos que ahí se ofertan, esto, en medio de una severa crisis económica agravada por los apagones.
De hecho, estas ferias se han convertido en un espacio para sortear la falta de ingresos de las familias ecuatorianas.
Así, los pulgueros no solo se tratan de comercializar ropa usada, sino también nueva y original, con marcas como: Zara, Bershka, Jordan o Nike. Pero, además en estos lugares la gente puede encontrar juguetes, zapatos, útiles de aseo y hasta dulces mexicanos.
Jóvenes le apuestan a estos negocios
Pablo Pillalaza, es propietario del pulguero “Feria Ecoamigable” ubicado en la avenida 6 de diciembre y Río Coca.
Pablo de 31 años y junto a su socio, le apostaron a un negocio propio en julio de 2023. Primero eran consumidores de los pulgueros, pero luego aprendieron de la dinámica y decidieron alquilar una casa con garaje para vender artículos de todo tipo, pero también para alquilar el espacio a otros emprendedores que quieran dar a conocer sus marcas, incluso de comida.
Ha sido un año de muchos retos para estos jóvenes pues, así como ha habido temporadas muy buenas, existen otras, como las de la época actual con apagones y crisis económica que ha golpeado al negocio.
“Abajo es un área cerrada, no teníamos problemas de lluvia o calores extremos, pero con los cortes de energía ya no se veía nada y toco abrir una visera para que entre luz (…) No tenemos música, no podemos hacer promoción”, contó Pablo.
En el primer piso de este pulguerito se colocan varios puestos de venta que ofertan artículos de todo tipo. Sus precios oscilan entre los USD 3 y USD 15. El segundo piso es ocupado por Pablo Pillalaza y su socio. Aquí también hacen transmisiones para redes sociales, donde logran vender gran parte su mercadería.
“Gracias a los En Vivos se tiene más afluencia de gente porque vienen a ver el producto y pasan por el resto de la feria”, mencionó el joven.
De las calles a la organización
Más adelante, en el mismo norte de Quito, frente a la estación de la Ecovía en la avenida Río Coca, encontramos una feria de pulgueros aún más grande. Nelson Naranjo es el creador de este lugar que ya lleva más de 30 años en esta dinámica de negocio.
Naranjo cuenta que un grupo de personas inició vendiendo en las veredas de El Inca, hasta que encontraron un espacio en la avenida Shyris que les permitió salir de las calles durante 10 años, pero el dueño del terreno falleció y les tocó buscar un nuevo sitio para ubicarse, de esa manera llegaron a unos predios que arrendaba el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
“En las calles éramos perseguidos de la Policía Metropolitana”, recuerda.
Nelson Naranjo indicó que luego de tantos años, los vendedores se han vuelto una sola familia y cada uno vende artículos de todo tipo, como ropa nueva y usada, artículos del hogar, zapatos, juguetes, muebles, adornos, vajillas o antigüedades.
“La mayoría de la gente viene en confianza porque nosotros no permitimos la venta de cachinería, cosas ilícitas, electrodomésticos, computadoras, celulares o mascotas”, resaltó.
El pulguero abre de 08:30 a 16:00 los viernes, sábados y domingos. En este lugar existen cámaras de videovigilancia y guardianía.
Una apuesta a la temporada navideña
Rosa Yuxzapata vende ropa nueva de Colombia y Perú, ella asegura que los precios de este lugar son muchos más baratos que los de Ipiales y por ello la gente prefiere visitar los pulgueros.
“Los sábados hay filas de por lo menos 200 personas que quieren ingresar. Se les entrega un número para que puedan ingresar de manera organizada”, remarcó.
Odalis Escobar en cambio vende ropa americana de segunda mano, por unidad o por paca. La comerciante indicó que los usuarios prefieren los pulgueros no solo por el precio sino también porque con ello cuidan el planeta.
“Nos ha ido super bien (…) El precio es desde USD 5 y además con ello cuidamos el planeta porque le dan un nuevo uso a las prendas que son de alta calidad”, puntualizó.
Apagones
Todos coinciden que los apagones en esta época sí han afectado porque hay gente que suele hacer transferencias para pagar y con los cortes de energía este proceso se les dificulta.
“En este tiempo hemos tenido un problema con la luz (…) la venta bajó un poco, pero no me quejó sí logramos vender porque la mercadería es buena”, comentó Rosa Yuxzapata.
Todos los pulgueros tienen grandes expectativas para esta temporada navideña. Desde semanas atrás hacen propaganda en sus redes sociales e invitan a la gente a visitarlos.