En un sector murieron 17 personas en un día por excesos de la Policía y Fuerzas Armadas, agregó.
Rocío Silva, excongresista de Perú y exsecretaria Ejecutiva de la Coordinadora de Derechos Humanos, destacó que a estas alturas de crisis política y social que vive su país se hace imprescindible la renuncia a la Presidencia de Dina Boluarte.
En esa línea, Rocío Silva manifestó que una vez que Dina Boluarte tomó juramento en el Congreso para ascender, se esperaba que llame a nuevas elecciones. Pero al contrario, en su discurso, aseguró que se quedará en el poder hasta el 2026.
“Esta situación lo vimos como rara, extraña, difícil. Nos preguntamos qué iba a pasar ahora, no esperábamos la movilización del Sur Andino y otras del norte y nunca pensamos que serían tantos asesinatos”.
Rocío Silva explicó que del 27 de diciembre hasta hoy, han fallecido 62 personas producto del uso abusivo de la fuerza de la Policía y de las Fuerzas Armadas. Han muerto 10 adolescentes, uno de 15 años por bala en el cerebro. “Es indignante”.
Recordó que el sábado 21 de enero se produjo algo inédito en 20 años de democracia de Perú y fue la irrupción de la Policía en la Universidad de San Marcos para desalojar a los movilizados, que estaban refugiados y pernoctando en esas instalaciones tras llegar desde Puno y Ayacucho.
“Ahora la población no reconoce otra cosa que la renuncia de Boluarte porque hoy en día ya tiene las manos manchadas de sangre. La gente corea: ‘Esta democracia no es democracia, Dina Asesina’”.
Subrayó que la Presidenta de ese país es abogada y sabe que deberá enfrentar procesos judiciales por crímenes de lesa humanidad e incluso no descartó que por esa misma razón, Boluarte se aferre al poder.
Para Silva, la crisis en Perú comenzó en el 2016 cuando perdió Keiko Fujimori y ganó Pedro Pablo Kuczynski. Entonces, la mayoría congresista de la primera se dedicó a petardear al Gobierno hasta que renunció.
Posteriormente subió Martín Vizcarra y Keiko trató de imponer condiciones de a quien poner o sacar del gabinete, al no tener oído, dio guerra y terminó con la vacancia en 2020 por lo que asumió Manuel Merino: “Hubo movilizaciones fuertes murieron 2 personas y ahí subió Francisco Sagasti para convocar elecciones y ahí ganó Pedro Castillo”
Mencionó que ahora ocurre lo mismo pues Keiko no llegó a la Presidencia pero obtuvo mayoría congresista que dificultó la administración de Castillo.
Sin embargo también se sumaron signos fuertes de corrupción, lo que ha constituido la tormenta perfecta que inició con el anuncio del exmandatario de cerrar el Congreso y reestructurar el Tribunal Constitucional, el Poder Judicial el Ministerio Público. No se puede negar eso.