Asimismo, experta epidemióloga demanda medidas integrales, basadas en análisis epidemiológico, económico y social.
Punto Noticias. El presidente de la Federación de Comerciantes Minoristas de Pichincha, Carlos Castellanos, rechazó la declaratoria de estado de excepción y confinamiento los fines de semana (sábados y domingos), por cuatro semanas, a partir de este viernes 23 de abril hasta el miércoles 20 de mayo, por sugerencia del COE Nacional.
Deploró que este sector del comercio por cuenta propia tiene que enfrentar la pandemia en condiciones adversas y de manera desigual, en comparación con otras personas que tienen un trabajo, un sueldo o que han logrado ahorrar algo para contrarrestar la crisis.
Reclamó que no tienen ningún tipo de ayuda, como créditos, bonos, para quedarse en casa, por lo que tienen que salir a trabajar, aun a riesgo de contagiarse con la enfermedad, para poder alimentar a la familia.
Castellanos considera que un confinamiento, como el propuesto por el COE Nacional, es un golpe todavía más fuerte, porque, durante la pandemia, la gente se acostumbró a salir a realizar sus compras los viernes, sábados y domingos.
“Al encerrarnos, no vamos a tener la oportunidad ni siquiera de poder enfrentar adecuadamente esta pandemia, peor hacer nuestra actividad económica. Sin alimentación, sin medicina, es muy difícil”, alertó.
Previno que, si las autoridades competentes, no entregan alimentos, medicinas, a los sectores sociales que no tienen absolutamente nada, de manera obligada, van a salir a las calles a buscar cómo defender la vida. Si no les mata el COVID-19, va a matarles el hambre, la necesidad, advirtió.
Condenó que los funcionarios del Gobierno Nacional, ni de los municipios, han levantado un plan para enfrentar la enfermedad en mejores condiciones, no solamente con medidas restrictivas.
La médica epidemióloga Andrea Gómez estuvo de acuerdo con Castellanos, en que se necesitan acciones no únicamente restrictivas, sino también socioeconómicas que apoyen a las personas que no pueden permitirse una cuarentena puedan hacerlo.
A su criterio, el problema de estos confinamientos focalizados, los fines de semana, es que afectan al mismo sector vulnerable que sigue afectado, tanto en número de contagios como de fallecidos.
Gómez indicó que estas medidas planteadas por el COE Nacional para nuestro país han demostrado en otros países que no son efectivas, como en el caso de Chile, en donde más bien aumentó aún más los casos.
Criticó la falta de control temprano de la enfermedad, que ocasionó que se extienda aún más la curva epidemiológica, porque en un momento empieza a crecer rápido y, por falta de medidas efectivas, se convierte en una meseta, que va sumando muchos casos y a la vez mortalidad, que es el problema de este momento.
Apuntó que Colombia, Chile, entre otras naciones, tomaron esta clase de medidas cuando la capacidad hospitalaria estuvo en el 75%. En cambio, Ecuador tiene una ocupación hospitalaria del 100%, sin camas, con una lista de espera muy grande para cuidados intensivos; es decir, personas que necesitan atenderse de manera inmediata, para evitar que siga agravándose la situación.
Para la experta médica, no se están tomando las decisiones correctas, porque no han hablado de aumentar camas, pruebas PCR, fortalecer la atención primaria de salud y el sistema de salud, para evitar que las mismas personas que vacunan estén a cargo del control de la pandemia.
Cuestionó el accionar del Gobierno de Lenín Moreno que durante un año ni siquiera ha puesto techo al costo de las pruebas PCR, lo que ha afectado al mismo sector vulnerable de la población: las personas de escasos recursos económicos.
Se necesitan medidas integrales, no solo restrictivas, que vengan de la mano de un análisis epidemiológico, económico y social, reclamó.