Se conceden beneficios tributarios a ciertos sectores y la deuda externa se hace pagar a clases medias y populares, empobreciéndolas, cuestionó la economista.
La economista Wilma Salgado destacó que entre 2010 y 2023, Ecuador perdió USD 69.654 millones por la entrega de exoneraciones, incentivos y beneficios tributarios a grandes empresas y transnacionales.
“Si añadimos el 2024 ya sobrepasamos los USD 70.000 millones. Todo por decisiones políticas”, agregó.
Salgado explicó que si no hubiese esas exoneraciones, concedidas a dedo por gobiernos de turno, el Ecuador no tendría déficit desde el 2010 y mucho menos deuda externa.
“Los beneficios se conceden a ciertos sectores y la deuda se hace pagar a clases medias y populares, empobreciéndolas”, aseveró.
La economista destacó que todo esto ocurre, mientras el Impuesto al Valor Agregado (IVA) subió del 12% al 15% y se incrementaron los precios de las gasolinas Extra y Ecopaís, sin que exista una retribución a las grandes mayorías, puesto que incluso la inversión pública sigue cayendo en cifras récord.
En tan solo un año disminuyó en un 45%.
La economista detalló que la:
Inversión pública en 2023 fue de USD 505 millones
Inversión pública en 2024 es de USD 276 millones
“Los ecuatorianos estamos sometidos a extrema presión por varias vías: La contracción de la inversión pública que deteriora el mercado laboral. Si hay menos empleo significa menos ingresos para las familias”, remarcó.
Wilma Salgado indicó que el propio Banco Mundial advierte que la proyección del crecimiento económico de Ecuador en este año pasó de 0,7% a 0,3%, es decir que el país está en camino a una recesión, sin considerar la contracción del consumo de los hogares y por ende la afectación a las empresas y el empleo.