El agua que recorrerá por este canal es la memoria de miles de pichinchanos que lucharon por este recurso. «Para nosotros el agua no es dinero, es vida» ha manifestado la prefecta Paola Pabón.
Punto Noticias: El pasado jueves 01 de octubre de 2020, los 67 kilómetros del canal de riego Cayambe – Pedro Moncayo llevaron un caudal de agua de una fuente natural envidiable, la laguna San Marcos que se encuentra a 3.000 metros sobre el nivel del mar, a las parroquias de Olmedo, Tupigachi, Ayora, La Esperanza, Tabacundo, Malchinguí y Tocachi, con una población beneficiaria de alrededor de 10.000 familias, quienes han esperado con paciencia cuatro décadas por esta canal tan anhelado.
Con esta obra del Gobierno de Pichincha inicia una nueva etapa en el desarrollo y crecimiento de la provincia, que apunta a mejorar la calidad productiva y la exportación de productos a los mercados más exigentes, cumpliendo con la palabra y el compromiso asumido por las autoridades provinciales, quienes continúan trabajando para convertir a Pichincha en una potencia productiva nacional.
El cantón Pedro Moncayo y el cantón Cayambe, ubicados al norte de la provincia de Pichincha, después de 40, hicieron realidad su sueño tras una larga y tediosa espera por el agua para sus cultivos y el fomento de la agricultura y la productividad .
En esas bastas zonas agrícolas del norte de Pichincha la provisión de agua podrá hacer fructificar sembríos de papa, maíz, cebada, hortalizas y algunos granos y, por cierto, la pastura para el ganado.
La fecundas zonas agrícolas transformarán la vida de la gente con más cantidad y calidad de productos para abastecer los mercados cercanos de Quito y sus alrededores, y dejar recursos muy importantes para agricultores y campesinos.
En un acto con presencia de campesinos y agricultores y pequeños ganaderos de Pesillo y San Pablo Urco se llevó a efecto en el Parque Arqueológico de Cochasquí, lugar simbólico de la provincia por el cual cruza este canal, el anuncio de la buena nueva de una antigua aspiración para los cantones, donde varios comuneros murieron esperando el agua ansiada que ahora es una realidad.
Las autoridades provinciales compartieron con la comunidad beneficiaria el ritual ancestral «Mama Yaku Pichay» para celebrar esta gran noticia para la provincia y dar inicio a una nueva etapa en la productividad de Pichincha.
La prefecta, Paola Pabón manifestó que 40 años tuvo que esperar Cayambe y Pedro Moncayo para ver concretado este sueño. «Me siento feliz de que la vida me haya permitido recibir esta obra que representa un orgullo para los pichinchanos que tanto lucharon por el agua. Esta obra no es el fin, es un medio para la producción, para la soberanía alimentaria, para que los productos que salen de nuestra tierra alimenten el cuerpo, pero, sobre todo, la memoria. El agua que recorrerá este canal, es la memoria de miles y miles de Pichinchanos que lucharon por este recurso. Para nosotros el agua no es dinero, es vida», resaltó Pabón.
La idea del Gobierno Provincial de Pichincha es involucrar a los comuneros en el manejo y la administración del agua. La cabal distribución del recurso es clave para dotar de riego a las zonas productivas que pueden transformar la realidad socioeconómica de los cantones Cayambe y Pedro Moncayo junto a sus parroquias rurales.
Una vez firmada el acta de recepción definitiva, el Gobierno de Pichincha podrá mediante un trabajo conjunto con la comunidad construir las redes terciarias tanto por contratación como por cogestión con el objetivo de poder llegar con el agua a la cabecera de cada parcela de los agricultores.
Fabián Andrango, Presidente del Consorcio del Agua – CODEMIA, afirmó que con la recepción del canal, empieza la etapa más importante para la producción de la provincia.
«Agradezco la apertura del Gobierno de Pichincha para que el manejo de esta obra sea público-comunitario. Este gran sueño que ahora es una realidad ha sido gracias a un trabajo coordinado. Debemos articular esfuerzos para cuidar de este recurso natural y que pueda llegar a todos», manifestó. (C.D.A.)