“El llamado al diálogo es un discurso de la derecha”, afirmó Isabel Ramos, comunicadora y catedrática universitaria, quien resaltó que aunque el diálogo es una herramienta de la democracia y la defensa de los intereses populares, también es un tema puede ser usada desde una posición de subordinación frente a intereses concentrados.
La experta recordó que cuando un gobierno como el de Rafael Correa, toca o se mete con el poder, se ocasionan conflictos, los cuales se magnifican como una problemática social a través de medios de comunicación que intentan posicionar que el perjuicio de los sectores poderosos es el perjuicio de todos y que las demandas que exigen son sociales.
De ahí que Ramos, sostuvo que no es posible solucionar un conflicto con la mera voluntad del dialogo dando privilegio exclusivo a ciertos sectores que buscan retomar el protagonismo que perdieron en los últimos diez años “y que en este Gobierno ya tienen presencia en el gabinete”
Desde esa base es que surge el discurso anticorrupción utilizado como herramienta de acumulación política para impactar en los sectores medios de la población y el llamada a la consulta popular, detalló la docente.
“Existen intereses y se dialoga como si no hubiera y que todos los actores son de buena fe”, lamentó Ramos ejemplificado con que se habla de empleo pero al mismo tiempo se maneja el discurso de flexibilización laboral.