David Molina detalló que el 80% de supuestos vehículos híbridos funcionan a combustión, es decir no cumplen con su función de no ser contaminantes.
David Molina, director Ejecutivo en Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana (Cinae), señaló que el impuesto a los vehículos usados, no tiene relación con un control de lavado de activos, pues más bien tiene un efecto netamente recaudatorio que afectará a las 360.000 personas que adquirir este tipo de autos cada año.
“Este impuesto le permitirá al Estado contar con USD 60 millones u USD 80 millones para usarlos en el fortalecimiento de la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE)”, agregó.
La propuesta del empresario es más bien que se reclasifiquen a los vehículos híbridos, pues en su mayoría no cumplen con la supuesta no contaminación al medioambiente. Con ello, el Gobierno podría recaudar entre USD 100 millones y USD 120 millones.
Vehículos híbridos
David Molina detalló que el 80% de supuestos vehículos híbridos funcionan a combustión, es decir no cumplen con el motor eléctrico y la batería, que les permitiría no ser contaminantes, y pese a ello tienen exoneraciones tributarias amplias, porque no pagan aranceles, ni el impuesto a los consumos especiales.
“Los verdaderos híbridos tienen una gran batería y un motor eléctrico con buena potencia (…) Los micro híbridos no se puede movilizar sin gasolina y esos se venden en Ecuador”, alertó.