Juan Fernando Flores, Esteban Torres y Virgilio Saquicela repasan el antes, durante y después de la primera muerte cruzada en la historia de Ecuador.
La muerte cruzada llegó a Ecuador la madrugada del 17 de mayo de 2023, luego de dos años de Gobierno de Guillermo Lasso. Con el decreto 741, el expresidente disolvió a la Asamblea Nacional y convocó a elecciones anticipadas, agudizando la crisis política en el país.
Pero, ¿qué llevó a Ecuador a vivir la primera muerte cruzada en su historia?
El exconsejero de Gobierno y exasambleísta de la bancada oficialista, Juan Fernando Flores, habla de un desentendimiento entre los bloques políticos. Sobre todo, dice, en el Legislativo, donde ya no existían consensos.
«Era meternos el pie entre todos y eso al final le hizo daño al país (…) Era mejor seis meses en el purgatorio, que dos años en el infierno», repasa Juan Fernando Flores.
Para el exjefe de bancada del Partido Social Cristiano y actual viceministro de Gobernabilidad, Esteban Torres Cobo, la muerte cruzada llegó luego de una serie de errores de la administración de Lasso, que rompió la comunicación con los diferentes grupos políticos.
«El Gobierno entró en una postura de ataque, choque, destrucción y mentira. Eso derivó en un gobierno que terminó con el 7% de popularidad».
Virgilio Saquicela, expresidente del Parlamento, alega ineptitud del Guillermo Lasso. Sostiene que su Gobierno no tuvo sindéresis con las necesidades del Ecuador ni en lo social ni en la seguridad ni en lo político.
«El Gobierno de Lasso ha sido nefasto», subraya.
Lasso decretó la muerte cruzada un día después de haberse iniciado el juicio político en su contra y a puertas de la votación en el Pleno del Parlamento, que buscaba su destitución y censura, por un presunto peculado. ¿Había los votos?
Flores dice que no existían los votos y recuerda que algunos exlegisladores se retiraron de sus bancadas, como en el caso del Partido Social Cristiano, Pachakutik e Izquierda Democrática, quienes no apoyaron el juicio político a Lasso.
Torres, quien fue interpelante del juicio político a Lasso, afirma que el Parlamento tenía las 92 voluntades para censurar y destituir a Guillermo Lasso, si este no firmaba el decreto 741.
Para Saquicela, también existían los votos y argumenta que la nueva mayoría legislativa lo eligió como titular con 96 votos; los mismos que existían para el juicio político.
En mayo de 2021, Guillermo Lasso inició su gestión con el 74% de aprobación, según Perfiles de Opinión. Dos años después y sin terminar los cuatro años para los que fue electo, Lasso dejó el poder con el 84% de desaprobación. Eso lo ubicó además como el peor presidente de la región, con el 87% de imagen negativa sobre su gestión, de acuerdo con la Consultoría CID Gallup.
Flores, exconsejero de Gobierno reconoce errores en la gestión gubernamental de Guillermo Lasso y sostiene que tras dejar Carondelet, el Movimiento CREO se ha sentado a analizar estas fallas para corregirlas en un futuro.
Para Esteban Torres, actual viceministro de Gobernabilidad, el Ejecutivo de Lasso fue el peor de los últimos años.
«Lo que pasó luego de la muerte cruzada, ya sin Asamblea, fue un desastre completo. Una incapacidad de gobernar, que fue un fracaso del peor gobierno de los últimos 30 años.
Las elecciones anticipadas aceleraron la coyuntura política y todo se definió en balotaje. El 20 de agosto, Luisa González y Daniel Noboa fueron los candidatos más votados; el 15 de octubre, el empresario guayaquileño alcanzó el 51, 83% del escrutinio, con lo que se convirtió en Presidente del Gobierno de Transición. Todo en medio de las elecciones más violentas de la historia.
Pero esto no termina. En un año, los ecuatorianos volverán a las urnas para elegir a un nuevo Presidente; mientras el pueblo lucha a diario contra la violencia recrudecida, los índices de desempleo, la corrupción enquistada en las empresas públicas, la crisis energética y más problemas que son parte de la herencia de Guillermo Lasso Mendoza, quien sueña con volver en el 2025.