El MSP y el Snai se acogieron al silencio y no refutaron el pedido de Wilman Terán de ser trasladado de La Roca en Guayaquil a la cárcel 4 en Quito, destacó la jueza.
A las 20:04 del viernes 16 de agosto, la jueza Enma Tapia emitió un comunicado, respondiendo a la Fiscalía por los allanamientos que realizó en su oficina de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) y su vivienda, por el caso Confourtable.
“Siempre lo he dicho: lean mis sentencias, júzguenme sobre la base de mi trabajo, no sobre opiniones políticas o coyunturales”, señala la jueza.
Tapia enfatizó que ninguna institución, poder o entidad debe tener la potestad de interferir o amedrentar al poder judicial en el ejercicio de sus funciones, porque solo así se puede lograr que las decisiones judiciales sean libres de cualquier influencia externa y se mantengan fieles al mandato constitucional.
Hábeas corpus a Wilman Terán
Enma Tapia detalló que el hábeas corpus, concedido a favor del expresidente del Consejo de la Judicatura, Wilman Terán, que permitió su traslado de la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, a la cárcel 4 en Quito, fue por el silencio del Ministerio de Salud y el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (Snai).
La jueza señaló que Wilman Terán justificó su solicitud de hábeas corpus, con un presunto daño psicológico del que habría sido víctima en la cárcel de La Roca. Esto, según Enma Tapia, debió ser refutado por el MSP y el Snai con pruebas y argumentos, sin embargo, se acogieron a su derecho al silencio.
“La falta de diligencia de las partes procesales no debe confundirse con un simple acto de silencio, en realidad es una demostración flagrante de irresponsabilidad procesal”, enfatiza en el comunicado.
Enma Tapia remarcó que producto de la falta de respuesta del Snai y el MSP, el tribunal tuvo la tarea de responder sobre la base de las pruebas presentadas por Wilman Terán, de ahí que la sentencia, dijo, se fundamenta en el principio inquebrantable de imparcialidad judicial.
Independencia judicial
La jueza Enma Tapia detalló que en sus 15 años de ejercicio profesional ha actuado con base a los hechos y pruebas presentadas, garantizando que ningún nombre, afinidad política o presión externa influya en sus resoluciones.
“La justicia no reconoce rostros. Reconoce la verdad y la evidencia, por ello, como jueza de la República, es mi deber aplicar la ley con total imparcialidad, sin distinción de personas, cargos o influencias externas”, subrayó.
Enma Tapia concluyó el comunicado, asegurando que está presta para defenderse con sustento técnico y jurídico.
