Además, el Primer Mandatario aseguró que en su Gobierno se detendrá la persecución política a las personas que piensan diferente. 

El nuevo Presidente de la República, Guillermo Lasso, dio su primero discurso como Mandatario de Ecuador y aseguró que en su Gobierno no habrá cabida para la persecución política y aspira que en su gestión se de paso a una renovación completa en el país.

Lasso tomó juramento ante la Presidenta de la Asamblea Nacional, Guadalupe Llori, y una de las primeras cosas que hizo, fue aseverar que recibe un país sumamente endeudado, con un nivel de desempleo histórico y que ha deslumbrado por su incapacidad para hacer frente a la pandemia.

“Países en similares condiciones encararon de forma más ordenada y eficiente a la pandemia. Sobretodo, libres de corrupción”.

De igual forma, recalcó que los Mandatarios han fallado al país, ya que ellos traicionaron a los principios fundacionales de Ecuador y esto ha derivado en que la nación se mantenga estancada. Por otra parte, indicó que ”el pueblo ecuatoriano es el mejor pueblo al que un Presidente puede aspirar«.

Lasso también aseguró que se acabará la persecución política y se comprometió a que no gobernará en contra de nadie, a pesar de que emitan cualquier criterio o crítica en su contra.

“Vamos a tener la humildad, pero sobretodo la fortaleza para decir que seré Presidente y solo Presidente. No perseguiremos a nadie y no callaremos a nadie. Gobernaremos para todos”.

 

En otra parte de su intervención, Lasso indicó que abrirá las puertas al comercio mundial y que intentará que Ecuador ingrese, en el menor tiempo posible, a la Alianza del Pacífico como un socio comercial de pleno derecho.

“Abriremos a Ecuador a tratados de libre comercio con nuestros más grandes aliados para buscar un comercio libre y justo. Más Ecuador en el mundo y más mundo en Ecuador”.

El Presidente también subrayó que su Gobierno dialogará con todos los sectores y construirá puentes con sus detractores, por lo cual, Ecuador se mantendrá como un Gobierno Laico.

“Quiero ratificar que seré el Jefe de un Estado laico, pero aquello no implica un país donde se niega nuestro lado espiritual, tampoco impide que impulsemos una reconciliación entre el Estado con las religiones que en Ecuador conviven.

 

Fuente: Transición Democrática 2021 – Pichincha Comunicaciones