En esos chats se demuestra que el caso contra Freddy Carrión fue forjado y armado entre la Fiscalía y la Policía, con complicidad de los gobiernos de Lenín Moreno y Guillermo Lasso.
Priscila Schettini, integrante de Acción Jurídica Popular, aseguró que los supuestos chats provenientes del celular de Fernando Villavicencio tienen que ser públicos, porque no es parte de ninguna investigación reservada, como ocurre con los delitos sexuales, por ejemplo.
“Aquí son doble moral porque los chats del caso Metástasis, Purga y Plaga, sí publicaron en todos los medios de comunicación y no pasó nada”, agregó.
Chats Villavicencio
Schettini contó que inicialmente conoció de los chats por una cuenta de X, llamada Anonymus, pero que no le prestó atención, hasta que la propia Fiscalía envió un comunicado asegurando que esa información era falsa.
“La propia fiscal alerta cuando dice que lo que circula es falso. ¿Cómo metes toda una institución para desmentir una cuenta troll?”, se preguntó la activista al indicar que esto dio pie para empezar a investigar.
Caso Freddy Carrión
La integrante de Acción Jurídica Popular detalló que su primera búsqueda, en esos chats, fue todo lo referente a su esposo y exdefensor del Pueblo, Freddy Carrión. Ahí pudo ratificar como se forjó y armó el caso entre la Fiscalía, Policía y actores políticas, con la complicidad de los Gobiernos de Lenín Moreno y Guillermo Lasso.
“En una conversación entre Freddy Carrión y Diana Salazar, la fiscal reconoce que la escena donde se encontró a Freddy estuvo manipulada y que la Policía hizo un mal procedimiento”, remarcó
Priscila Schettini contó que en esos chats tuvo acceso a unos partes policiales que nunca fueron adjuntados al expediente de Carrión: “Esos apenas los conocimos anteayer”.
Schettini indicó que en dichos documentos se evidencia que la Policía asegura que no hubo flagrancia ni delito.
“No se lo acusó de delito sexual. Fue puesto en la cárcel de manera ilegal y arbitraria”, acotó.
Demanda internacional
La activista informó que pedirá una copia espejo de los chats a fin de poner una denuncia por el caso de su esposo, pero también para dejar en evidencia a, lo que llamó, la mafia mediática.
“También vamos a plantear recurso de revisión y una demanda internacional. Ahí presentaremos todos estos elementos, donde se demuestra que Diana Salazar filtró toda la información a Fernando Villavicencio”, reiteró.