Emprendimientos, como panaderías, reportaban la pérdida de su producción por los cortes de luz no planificados.
Las redes sociales fueron el espacio de desahogo de la ciudadanía que, con enojo, reclamaba la falta de cumplimiento en los horarios de los apagones.
El sábado 9 de noviembre, los usuarios de X reportaban que les cortaron la luz, una o dos horas antes de lo programado. El reclamo era directamente a las empresas eléctricas.
Casi al mediodía el Ministerio de Energía reconoció, lo que muchos técnicos eléctricos advertían, las condiciones de las hidroeléctricas estaban empeorando y era necesario incrementar los cortes de ocho a 12 horas.
Las empresas eléctricas sacaron nuevos horarios de cortes del fin de semana, con base a la disposición del Operador Nacional de Energía (Cenace), pero aquello tampoco se cumplió.
Algunos sectores en Quito tuvieron apagones durante casi todo el día y lo mismo ocurrió el domingo.
Una vez más, el 10 de diciembre las empresas eléctricas sacaron otros horarios, a través de las redes sociales. Esta intermitencia provocó que algunos negocios, como panaderías, pierdan su producción, pues los hornos son eléctricos y por ende la masa se echa a perder, una vez metidos en esos espacios.
Esta semana los cortes se mantendrán en 12 horas, que se cumplirán en dos bloques durante el día, en los sectores residenciales. La ciudadanía está a la expectativa, pues la propia ministra de Energía encargada, Inés Manzano, ha adelantado que las decisiones serán dinámicas.