Las personas naturales, empresas y contribuyentes tienen hasta el 29 de noviembre para implementar este sistema.
Aproximadamente 1,5 millones de contribuyentes, personas naturales y empresas, aún no obtienen la facturación electrónica a menos de dos meses para que concluya el plazo dado por las autoridades del Servicio de Rentas Internas, previsto para el 29 de noviembre de 2022.
Hasta este miércoles. 19 de octubre de 2022, 344.588 personas con Registro Único de Contribuyentes (RUC) activo, ya cuentan con el sistema electrónico de facturación, de un total de 2.392.594 contribuyentes entre personas naturales u y sociedades.
El Servicio de Rentas Internas recordó que la disposición es obligatoria para los negocios de todos los tamaños y para las personas naturales.
Serguei Proaño, CEO y fundador de la empresa especializada en facturación electrónica Minegocio.com.ec, indica que la brecha es muy grande y esto es muy preocupante, porque desde que comenzó el sistema de facturación electrónica en el 2014; es decir, hace 8 años, apenas 300 mil personas optaron por este mecanismo y es muy complicado que en menos de dos meses lo hagan 1,5 millones de contribuyentes, lo que podría colapsar las plataformas tanto de Banco Central como del mismo Servicio de Rentas Internas que no están preparadas para soportar dicho tráfico.
Los contribuyentes pueden activar el servicio gratuito de facturación electrónica que ofrece el SRI o contratar a una de las empresas privadas que han desarrollado su propio software de facturación electrónica, pero esto significa la estocada final para las imprentas artesanales que destinaban el 90% de su trabajo a la impresión de estos documentos.
Como una lenta y dolorosa agonía lo describe Fernanda Martínez, representante de la Imprenta Producciones Gráficas, a la situación que vive el negocio que implementó su padre en 1983 y que sirvió para alimentar y educar a varias generaciones.
Ahora, esta imprenta artesanal, ubicada en el centro norte de Quito, está prácticamente convertida en una bodega, que poco a poco se vacía. Como ella hay cientos que han cerrado o están en ese proceso, debido a la disposición del Servicio de Rentas Internas.
Fernanda advirtió que el SRI no se reunió con el sector de las imprentas artesanales y tampoco socializó la disposición ni les ofreció capacitación, pero, lo que es peor, no se tomó en cuenta que cientos de familias se quedaran sin sustento en momentos tan complicados por la crisis económica y los altos niveles de desempleo que tiene el país.
Afirma que es muy complicado realizar otro tipo de impresiones u ofrecer otra clase de servicio, porque implica una fuerte inversión en nuevos equipos. La tecnología al igual que con otros sectores desplaza a los oficios que hasta hace unos años eran tradicionales.
Según Fernanda, las facturas impresas representaban un 80% de su giro del negocio, ahora les queda la impresión para negocios populares que es una cantidad muy pequeña, por lo que estos negocios se han visto obligados a despedir a cientos de personas que hoy por hoy engrosan las filas de desempleados.
“Las autoridades de gobierno, no ha tomado en cuenta esto, no ha consultado con el sector gráfico para aplicar totalmente la facturación electrónica. El país no está bien económicamente. señaló. En las condiciones actuales y las consecuencias de la pandemia, necesitábamos salir a flote, no que nos hundan más”, manifestó.
Solo los negocios populares del sistema Régimen Simplificado para Emprendedores y Negocios Populares (RIMPE); es decir, aquellas personas naturales con negocios que tienen ingresos brutos anuales de hasta USD 20.000 podrán emitir comprobantes como notas de venta de manera física. No obstante, si realizan una transacción donde un cliente requiera una factura, deberán hacerlo de manera electrónica, aclara Sergueí Proaño al destacar las bondades del sistema electrónico porque ahorra tiempo, dinero y contribuye a mantener el medio ambiente.
Mario Ron, presidente de la Federación Ecuatoriana de Artesanos Gráficos (FEDAG), que integra a 2.000 micro empresarios del sector en 12 provincias del país, señaló que la impresión de facturas representaba el 60 % del negocio para estas imprentas, de ahí que en julio pasado pidieron al presidente de la República, Guillermo Lasso, que la facturación electrónica sea voluntaria y no obligatoria, al menos por dos años, pues aún están sufriendo las consecuencias de la pandemia, muchos de no hubo respuesta. Estos negocios están al borde de la quiebra, pero no hubo respuesta.
Fernanda Martínez dijo que cuando llegue el mes de noviembre el golpe será muy duro porque hay imprentas que se dedican solo a la facturación y no tendrán otra opción que cerrar sus puertas como lo han hecho un 80% de estos negocios. El trabajo ya empezó a disminuir desde marzo y en estos dos meses ya casi no tienen pedidos.
Este malestar también se expresó en Guayaquil, un grupo de propietarios y empleados de imprentas artesanales realizó, el 20 de septiembre pasado, un plantón en la sede regional del Servicio de Rentas Internas (SRI) para rechazar la implementación de la facturación electrónica obligatoria. Con carteles y megáfonos expresaron su dolor ante el inminente cierre de sus negocios, único medio de subsistencia para sus familias.
El síndico de la Asociación de Artesanos Gráficos del Guayas, Miguel Peralta, indicó que hace varios días, se reunieron con el director del SRI, Francisco Briones, para exponerle su situación, pero la respuesta fue que “él tiene que aplicar la ley, y que cualquier cambio le corresponde al presidente de la República”. El 1 de septiembre pasado entregaron un oficio en la Presidencia en Quito, pero hasta ahora no reciben respuesta y cree que no lo harán hasta llegar a noviembre.
De acuerdo con datos del SRI, en Quito hay 635 establecimientos autorizados para imprimir facturas. En el caso de Guayaquil hay 349.
El Servicio de Rentas Internas ofrece servicio gratuito de facturación electrónica o también puede contratar una de las empresas privadas que proporcionan su propio software de facturación electrónica, pero debe cumplir los siguientes requisitos:
- Debe estar al día en todas sus obligaciones tributarias.
- Mantener un convenio de débito bancario en el SRI.
- Obtener una firma electrónica certificada en una entidad pública o privada.
- Solicitar la autorización para emitir factura electrónica para período de pruebas, a través del portal web del SRI en línea.
- Solicitar en el portal SRI en línea la autorización para comenzar a emitir formalmente los comprobantes.
- El SRI tiene dos opciones para facturación electrónica: Facturador Electrónico Gratuito: Se ingresa a través de la página web del SRI, dando clic en la pestaña Guía Básica Tributaria. Esta opción permite generar, firmar electrónicamente y enviar los comprobantes para la autorización por parte del SRI.
- SRI & Yo: Se encuentra en el portal SRI en línea. Está dirigido a personas naturales no obligadas a llevar contabilidad, cumple con las funciones de generar, firmar electrónicamente, autorizar y notificar sus comprobantes mediante correo electrónico a los clientes.
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