Pérez exige al organismo internacional un procedimiento interno de auditoría. Además, pidió que no se utilicen los resultados del censo hasta que no se ejecuten una investigación de los resultados.
Punto Noticias.- El precandidato presidencial Yaku Pérez envió una queja al Banco Mundial, por la supuesta violación de derechos de los pueblos indígenas. Esta vulneración se habría llevado a cabo durante la ejecución del octavo Censo de Población, séptimo de Vivienda y primero de Comunidades.
«El Banco Mundial financia este proyecto que sistemáticamente ha violado los derechos de los pueblos y nacionalidades ecuatorianas», indicó Pérez a través de un comunicado, este martes 30 de mayo de 2023.
En el documento se mencionó que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), encargado del proyecto, violó normas del Banco Mundial, derechos de los pueblos indígenas, la no asimilación forzada, la libre determinación y la autoidentificación.
«Se violaron sus derechos a mantener información sensible, ya que se les obligó a entregar la cédula de identidad sin el debido procedimiento normado en la Ley de Protección de Datos».
Acusación
En la denuncia, Pérez señaló que este censo, que se realiza 12 años después del último, se llevó a cabo «sin una adecuada» campaña de sensibilización, que permitiera informar a la población sobre la necesidad de ser censada.
«Tememos seriamente que el INEC ejecutó premeditadamente el censo de forma silenciosa para que comunidades indígenas no sean censadas y no declaren su pertenencia indígena. De esta forma buscan reducir la proporción de indígenas para causar más invisibilización y exclusión a nuestros pueblos», indicó.
Además, agregó que no sería «sorpresa» que la proporción de indígenas anunciada en agosto de 2023 se reduzca en comparación con censos anteriores. «Luego se construirá una narrativa de que los indígenas somos insignificantes en el país».
Datos atrasados
Este 30 de mayo, Roberto Castillo, director del INEC, señaló que los resultados del censo realizado durante 2022 se conocerán recién en agosto de 2023. La fecha anunciada es tres meses después de lo previsto, en medio de cuestionamientos acerca de la veracidad de las cifras.
Castillo reconoció que no se censó a todos los ecuatorianos y hubo hogares donde el personal encargado de recolectar la información no llegó. Hasta febrero de este año, aún había 190 000 viviendas sin censar en las provincias de El Oro, Esmeraldas, Guayas y Pichincha. Según alertó el INEC, el principal obstáculo para no cumplir con los plazos establecidos fue la inseguridad.