Editorial de Radio Pichincha
Hay provincias y ciudades del Ecuador que no han superado el nivel de violencia y sobre todo la percepción de que las cosas están mucho peor que hace seis meses. Y una provincia con más riesgos e índices de muertes violentas es Los Ríos.
Por ejemplo, La ola de violencia que se vive en Quevedo es imparable y ayer domingo se sintió con mucho drama con el asesinato de la excandidata a Miss Ecuador, Landy Párraga Goyburo. Ella fue asesinada con varios disparos mientras se encontraba almorzando en una cevichería, tal como lo registra el video de ese local. Los sicarios llegan con facilidad, asesinan y se van sin ningún problema.
Las notas de prensa resumieron así este horrendo crimen: “La modelo y reina de belleza, estaba junto a sus amigos y allegados cuando sujetos le dispararon en varias ocasiones, su cuerpo quedó tendido en el suelo lleno de sangre. Párraga era también “influencer”, se caracterizaba por subir contenidos de forma constante en sus redes sociales contando a sus seguidores sobre sus actividades. El último sábado estuvo en la boda de una amiga celebrando y bailando”.
Y el escándalo y el escalofrío que provoca es porque se trata de una persona famosa, mujer y con unos contactos con personas supuestamente vinculadas a grupos mafiosos. Pero de ese tipo de crímenes hay muchos, todos los días, masacres donde se asesinan a cinco, seis, siete o nueve ciudadanos, sin importar edad o relación delictiva. De hecho, hay decenas de muertes “colaterales” que, por cierto, a la ministra del Interior, son “solamente 99” la semana antepasada.
Entonces, ¿por qué ocurre esto si ya tenemos al “Bloque de Seguridad” en las calles, en las carreteras, en las prisiones y en casi todos los espacios de decisión? ¿Nos van a repetir un sofisma del tamaño de la Basílica de que LOS DELINCUENTES SE ACTIVAN PARA OPONERSE A LA CONSULTA POPULAR?
Ya estamos convencidos que algo no está bien. O, para salir diplomáticamente: ya no saben cómo hacer que sus palabras, ofrecimientos y hasta spots se conviertan en acciones concretas, plausibles y con resultados positivos todos los días.
Si creen que ocuparse más de firmas acuerdos con el FMI nos traerá menos muertes y asesinatos ya no hay cómo confiar más, en serio.
Lo urgente ahora es parar la violencia, resolver los apagones y atender la pobreza. Si no se piensa en eso de verdad el futuro es cada vez más incierto, y en esa medida tendremos más emigración y otros problemas al mediano y largo plazo. PUNTO