Esperanza Martínez, directora de Acción Ecológica, destacó las preguntas de la consulta popular referentes a la minería y a la explotación petrolera en el parque nacional Yasuní, pues son buenas señales del Gobierno Nacional enmarcadas en el cumplimiento y respeto a los principios de Montecristi que le dan derechos a la naturaleza.
Respecto a la primera parte de la quinta pregunta, que se refiere a incrementar la zona intangible del Yasuní en al menos 50 mil hectáreas, Martínez la calificó como una deuda del anterior régimen, pues ese territorio es potencialmente genocida por lo que ampliar este territorio es importante, sin embargo destacó la necesidad de hacer un estudio para saber qué zonas serán las beneficiadas. “Debería crecer hacía las zonas controladas por la industria petrolera y que interfieren con la vida de los pueblos, porque hacen ruido, convoca presencia de terceros, entre otros temas”, agregó.
Sobre la segunda parte de la pregunta de reducir el área de explotación petrolera analizada por la Asamblea Nacional en el parque nacional Yasuní de 1030 hectáreas a 300 hectáreas, la activista explicó que el objetivo sería impedir que la actividad petrolera supere los límites concedidos para el extractivismo y en ese marco proceder a la reparación.
“Creo que el mensaje es dejar hasta ahí, hasta donde está la actividad petrolera (…) Son buenas señales y lo que corresponde por parte de organizaciones de la sociedad civil es hacer un monitoreo para que no haya un centímetro más de esas 300 hectáreas”, añadió.
De ahí que resaltó la importancia de que el régimen permita entrar a activistas como el grupo “Yasunidos” que en el gobierno de Rafael Correa fueron impedidos de ingresar a la zona para medir el impacto de la explotación petrolera, garantizando el respeto de la frontera de extracción e impedir que se toque un centímetro más.
Sobre la pregunta sexta que habla de la prohibición sin excepción la minería metálica en todas sus etapas, en áreas protegidas, zonas intangibles y centros urbanos, Martínez resaltó que no es un tema claro, pues no se explica las formas concretas en las que se dará cumplimiento a este tema.
“Deben existir señales fuertes como para que las personas que están luchando por proteger la naturaleza tengan garantías”, reseñó.