Han pasado 22 días y no hay señales del paradero de Natalia y su hija, de un año y medio; se estudia una carta.
La tarde de este 25 de enero, colectivos de mujeres y organizaciones feministas realizaron otro plantón en apoyo a la familia de Natalia Ojeda y su hija Sabina Álvarez Ojeda, de apenas un año y medio. Esta vez fue en Ambato, su lugar de origen. Ella y su bebé llevan 22 días desaparecidas.
🔴#ATENCIÓN | Natalia Ojeda y su hija Sabina, de un año, llevan desaparecidas tres semanas. Su familia y organizaciones de mujeres y feministas realizan un plantón a las afueras de la fiscalía de Tungurahua en Ambato, exigiendo respuestas. pic.twitter.com/CiN9Cz61hH
— Radio Pichincha (@radio_pichincha) January 25, 2023
Natalia tiene 31 años, hace tres conoció a Manolo Álvarez, padre de su hija, quien actualmente es el principal sospechoso de su desaparición. De Manolo tampoco se tiene rastro alguno.
Andrés Ojeda, hermano de Natalia, ha estado presente en cada plantón pidiendo celeridad en los procesos de búsqueda de su hermana y sobrina. En el Consejo Judicial Norte de Quito, donde trabajaba Natalia, quien cursa los últimos años de la carrera de Derecho, contó que conoció a Manolo en ese lugar. Él es abogado y fueron compañeros.
Andrés relató que su hermana y Manolo Álvarez no vivieron juntos después del nacimiento de Sabina. Durante su embarazo Manolo la habría aislado durante varios días sin permitirle tener contacto con otras personas.
“Había antecedentes del maltrato psicológico, que vivía mi hermana con ese tipo, no le dejaba hablar con nadie, la manipulaba”, aseguró Andrés.
Según detallan Andrés y Sheseña Meneses, una amiga, Natalia y Manolo Alvares no tenían ningún tipo de comunicación, por eso les sorprendió que acordaran un paseo, junto a su hija, por fin de año. Desde la última semana de diciembre hasta el 3 de enero habrían permanecido en la casa del padre de Álvarez ubicada en Salcedo, en Cotopaxi. Desde entonces no saben de ella.
En una conversación telefónica con su padre, Félix Ojeda, Natalia le habría dicho que debía tomar “decisiones importantes”. Luego su celular permaneció apagado y se lo encontró en la casa del padre de Álvarez, junto a otras pertenecías. Entre ellas, una carta dirigida a su familia.
Según detalla Andrés, en la carta Natalia se habría despedido, explicando que Manolo tenía problemas y que eso las ponía en peligro a ella y a su hija. Y que aunque no deseaba hacerlo, debían huir.
Andrés quiere que se haga un estudio grafológico a la carta. No sabe si hubo presión para escribir la carta, que está en manos de la Fiscalía.
Fiscalía ha realizado dos allanamientos dentro de este caso. No se encontró evidencia de forcejeo o violencia, incluso al realizar las pruebas de luminol. Eso le hace pensar a su padre que ellas están vivas.