En la cotidianidad de Quito, personajes y lugares se entrelazan para crear historias como la de Gonzalo Fernández, un trabajador de la zona azul e incesante lector.
Aunque dice no creer en el amor, el texto que más le ha gustado es ‘Amor en Tiempos de Cólera’, del nobel de literatura Gabriel García Márquez, cuya esencia rinde tributo a este sentimiento.
Gonzalo Fernández, tiene 55 años, vive por la Loma Grande y actualmente está estudiando la secundaria en el Colegio Manuela Cañizares. Desde hace 20 años trabaja como cuidador de autos, primero por el sector del estadio y ahora en la avenida de los Shyris.
Aunque ahora se define como una persona tranquila y feliz gracias a sus libros y a su faceta de estudiante, cuenta que hace un poco más de 20 años su vida fue trágica ya que estaba sumido en las drogas.
«Mi vida no era mía, no me pertenecía, las drogas no me permitían disfrutar de lo bueno, vivía en otro mundo uno triste y lamentable», recuerda.
Asegura que pudo salir y que gracias al ejemplo de sus hermanos que son profesionales, sabe que él también puede. Su deseo es ser abogado, escritor o alguna profesión relacionada a la lectura y escritura.
Asegura que en su casa tiene más de cien libros y al consultarle sobre sus favoritos, sonríe y dice que son muchos que se queda con Gabriel García Márquez, Mario Vargas Llosa y Roberto Bolaño.
«Bolaño escribe sobre cosas diferentes como el libertinaje, los gays, las lesbianas, y aunque son historias modernas y uno no entiende mucho, yo disfruto», indica, recordando que hay una escena donde la amiga de la protagonista se «roba a su esposo», se ríe.
Le gusta comprar sus libros, pero como a veces el presupuesto es corto y hay que sobrevivir, acepta obsequios. «Muchas veces los conductores de los autos que comparten el amor por la lectura me obsequian libros», señala.
Su oficina, como él la llama es en la zona azul de la tribuna del norte, cerca de la Shyris y Portugal.
Según una encuesta publicada en 2012, por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, INEC, el 73,5 % de los ecuatorianos dice tener el hábito de la lectura.
Sin embargo, solo el 28 % prefiere los libros, el resto, revistas, periódicos e internet. Según la información, Quito es la cuarta ciudad que más lee. Las primeras son Guayaquil, Ambato y Machala.