Previo a la pandemia una Sala Laboral tramitaba un aproximado de 60 causas al mes, hoy ingresan 120 y hay más gente en busca de empleo.
Punto Noticias.- A pesar de la pandemia, empleados públicos y privados recurren a los juzgados del país para que se tramiten las demandas laborales contra las empresas y entidades.
Unos piden indemnizaciones por despidos intempestivos, otros buscan el pago de remuneraciones pendientes. Pero todos coinciden en que los procesos judiciales avanzan lento.
Jueces laborales aseguran que están abarrotados de trabajo por el incremento de demandas durante la crisis por la Covid-19.
Según cifras levantadas por el Consejo de la Judicatura, en 2019 se registraron 19.790 causas de este tipo a escala nacional; ese mismo año se resolvió el 99%. En cambio, en el 2020 ingresaron a las oficinas judiciales 22.446 casos y quedaron represados 7.919. Esto ocurre, principalmente, en Pichincha, Guayas, Azuay, Manabí, El Oro y Los Ríos.
Cecilia es una de las personas que interpuso una demanda. Ella trabajó desde el 2005 en el área financiera de una aseguradora, en Quito. El pasado 24 de abril le notificaron de su despido a través de un correo electrónico. Por 15 años de trabajo le pagaron de liquidación USD 1 500.
Según la exempleada debía recibir USD 16 500. El artículo 188 del Código de Trabajo señala que una persona que ha laborado más de tres años en una empresa y es despedida intempestivamente debe recibir “el equivalente a un mes de remuneración por cada año de servicio”.
En agosto pasado, presentó la demanda, pero aún no se resuelve su caso.
Una jueza laboral de Quito cuenta que antes de la pandemia las audiencias para resolver demandas tardaban unos tres meses. Ahora, por la carga laboral, los magistrados convocan a las diligencias en seis u ocho meses.
Mientras, otra jueza advierte que en su despacho tiene 400 demandas que llegaron el año pasado y aún no logra despacharlas por la cantidad de procesos que ingresan a diario.
Previo a la pandemia una Sala Laboral recibía 60 causas al mes, hoy ingresan 120.
La suspensión de la jornada laboral en la Función Judicial (excepto Flagrancia) fue una de las causas para el represamiento de causas. Esta medida rigió desde el 17 de marzo hasta 11 de junio de 2020, cuando se reanudaron los servicios presenciales en los juzgados laborales.
Los jueces de lo Laboral combinan sus actividades entre lo presencial y el teletrabajo, pues esa es la disposición vigente. Así lo señaló uno de los jueces de esa área, quien dijo que eso también contribuye al represamiento de las causas.
Para los jueces, el 85% de las causas tiene relación con despidos intempestivos.
Fuente: El Comercio, redes sociales