Los representantes de la entidad de derechos humanos constataron las actividades ilícitas que se desarrollan en estos ingresos no autorizados.
Punto Noticias.- La diáspora venezolana continúa pese a continuar cerrado el puente internacional de Rumichaca, en la frontera norte, como efecto queda la masiva presencia de extranjeros que se ubican en algunos sitios de Tulcán para descansar y pedir ayuda. Freddy Carrión y funcionarios de la Defensoría del Pueblo inspeccionaron los pasos fronterizos entre Ecuador y Colombia, en la parroquia de Urbina, a 8 km de Tulcán.
Los inmigrantes llegan a la periferia de la urbe fronteriza y en varios sectores de la Panamericana E 35 (Y, entre Rumichaca y Tulcán, y en el trayecto Tulcán-Ibarra), allí preparan alimentos, se bañan y pernoctan al aire libre.
También, un importante grupo ingresa a la ciudad, ocupando lugares como parques, canchas sintéticas, portales. En estos sitios realizan una parada y solicitan dinero a los transeúntes y conductores de vehículos.
Las autoridades de control coordinan operativos conjuntos con el objetivo de desalojar a los grupos que ocupan estos lugares, que ante las denuncias de los vecinos de que, según ellos, estos puntos se convierten en áreas insalubres e inseguras.
Rothman Méndez, jefe de la Policía de Migración en Carchi, señala que aproximadamente 250 inmigrantes ingresan irregularmente cada día a Ecuador, por trochas cruzando el río internacional Carchi-Guaytara o por caminos de segundo y tercer orden.
No obstante, hay quienes aseguran que ese número se ha triplicado en los últimos meses por la complicada situación que vive Venezuela. Así mismo, los operativos policiales ejecutados en las últimas semanas en Tulcán ponen en evidencia la presencia de organizaciones transnacionales que se dedican a la trata de personas.
Según Freddy Carrión, Defensor del Pueblo, que arribó a la capital carchense el pasado miércoles 14 de abril, para constatar esta realidad. Durante un recorrido por los pasos fronterizos y el viaducto binacional (Rumichaca) afirmó que en Ecuador residen cerca de 450.000 migrantes venezolanos.
El principal de la entidad, explicó que la mayoría utiliza el territorio nacional como país de tránsito, porque van hacia el sur del continente. Las autoridades de frontera coinciden en que una de las dificultades que existe para frenar la migración irregular es que no hay legislación.
Por lo tanto, su demanda apunta hacia la aplicación de nuevas reformas a la Ley de Movilidad y mayor claridad en acciones de deportación y expulsión para los que delinquen en el territorio nacional. Carrión constató estas actividades desarrolladas en los pasos internacionales no autorizados.
A la Defensoría del Pueblo le preocupa la vulneración de derechos a la vida, no solo para los extranjeros, sino para los connacionales, porque se han convertido los pasos fronterizos en rutas de comercio constituido.
Carrión consideró positivo el anuncio de Guillermo Lasso, presidente electo del Ecuador, de regularizar a los migrantes y aprovechó su estancia en la frontera para reunirse con las organizaciones no gubernamentales que brindan apoyo a las personas en movilidad humana.
Para la segunda semana de mayo se gestiona una reunión entre los defensores del Pueblo de Ecuador y Colombia para abordar temas migratorios, hay temas urgentes para tratar como sobre las mafias organizadas dedicadas a la trata y explotación de personas en la zona de frontera, que pone en peligro a la población migrante.
Fuente: El Universo