Editorial de Radio Pichincha
Todo indica que nos han metido en unos escándalos judiciales y diplomáticos para no preocuparnos por lo que está pasando en la economía hogareña de la mayoría de las familias ecuatorianas. Claro, más de 10 días después de la vigencia del incremento del IVA todo está mucho más caro, la especulación se disparó en muchos productos y cada comerciante ha querido resolver la caída del consumo afectando la calidad y la cantidad de sus productos.
Los expertos hablan ahora de una canasta básica por encima de los 800 dólares. Y eso, que no es poca cosa, es una puñalada para millones de personas que no tienen para salir el mes, que ahora están pensando en irse del país y que al mismo tiempo no tienen derecho ni a enfermarse o al menos distraerse un fin de semana, porque YA LA PLATA NO ALCANZA.
¿Cómo les explican a los votantes de Daniel Noboa que ofreció una cosa y hace otra? ¿El mismo personaje electoral que dijo que no quería confrontación y que se concentraría en atender a la gente, no reprimir la protesta y tener otro comportamiento con la violencia? pero ¿si ahora los jóvenes y mujeres no mueren por los criminales van a morir por el hambre?
No vamos a subestimar ni bajar la importancia de un bochornoso acontecimiento como la invasión policial a la Embajada mexicana y el secuestro de Jorge Glas, pero en el día a día la economía se deteriora. Claro, desde la Mafia Mediática no se va a hablar del asunto, porque estos días está aquí una misión del FMI. En principio hablan de que Ecuador ha cumplido disciplinadamente con el ajuste neoliberal y por ello ya tendremos otro paquetazo.
Con más seguridad, de ganar la Consulta Popular, si la gana, vendrá la eliminación de los subsidios a los combustibles, las reformas a la seguridad social y más despidos en el sector público, además de los recortes a los presupuestos de los gobiernos locales. ¿Y si pierde? Igual, todo le resbala.
Están más ocupados en comprar asambleístas, en gastar en publicidad electoral, en encarcelar de por vida a Glas, tener ex jueces que ahora supuestamente revelan manejos inadecuados en las cortes y, para variar, en viajar a Miami a pasar un buen momento, tomar sol y revisar sus negocios por allá.
Así como estamos no esperen que la Consulta sea la panacea, por favor. Ya nos han engañado con las consultas de febrero de 2018, con la de febrero del año pasado y ya sabemos para que sirvieron. Tampoco esperen que vendiendo globos de ensayo y damas muy bellas en redes sociales la gente coma, tenga empleo o, como ya pasa en la Costa, no haya plata para poner a los niños, niñas y adolescentes en las escuelas o colegios. PUNTO