Otra alternativa, según la dirigencia, es el derecho a la resistencia es decir dejar de laborar debido a las pérdidas que registran.
Luis Felipe Vizcaino, presidente de la Federación Nacional de Transporte Pesado, señaló que frente a la subida del diésel en un 48% y de la canasta de repuestos en un 30%, han solicitado al Gobierno Nacional la focalización de los precios de los combustibles.
“Los fletes navieros han subido en un 500%. Antes de la pandemia traer un contenedor de llantas costaba USD1.500 el flete hoy cuesta USD8.000”.
Señaló que los mil millones de dólares de los cuales el Gobierno se jacta de haber recaudado por la liberalización de precios de los combustibles, es del bolsillo de la gente y sobre todo de los transportistas que se han visto sometidos a pagar altos costos, que hoy en día los está llevando a la quiebra.
“Hemos hecho una acción de resistencia y rechazo”.
En la lista de pedidos está también que:
- Se los incorpore en la fase dos de la vacunación porque está en primera línea. Informó que tres personas del sector han perdido la vida a causa del Covid-19
- Refinanciamiento real de las deudas del sector del transporte
- Implementación de una nueva ley de tránsito
- Abaratar impuestos, tasas y contribuciones que encarecen la canasta básica del transporte.
- La modernización de la ANT con la digitalización de trámites
Manifestó que no han podido dialogar con el presidente electo Guillermo Lasso, pues en campaña era más fácil encontrarlo, sin embargo desde que ganó las elecciones el 11 de abril no han podido tener un acercamiento: “La gente no soporta más, la gente está vendiendo sus vehículos”.
Indicó que de no haber solución se acogerán al derecho a la resistencia reconocido por la Constitución y la otra alternativa sería meterle la mano en el bolsillo de los ecuatorianos aumentando hasta en un 30% los productos de la canasta básica.
Fuente: Ecuavisa