Una mujer trans herida en medio de la octava masacre fue traslada de la cárcel de Cotopaxi hacia la del Regional No 8, sin su consentimiento y sin ser atendida.
La crisis carcelaria evidencia cada día la convulsión que se tiene en la sociedad ecuatoriana. Uno de los reclamos que ha venido existiendo por parte de las Organizaciones de Derechos Humanos ha sido, entre tantas críticas, el poco interés que tienen para garantizar los derechos de las personas trans en el país.
En medio de las masacres dentro de las cárceles, se ha denunciado que una mujer trans, llamada Mónica ha sido trasladada herida de la cárcel de Cotopaxi a la Regional No 8 en Guayas.
Desde Fundación Desafío se denunció que Mónica el día lunes, 3 de octubre, fue agredida por arma de fuego en Cotopaxi y la trasladaron a la Regional No 8 en Guayas, sin ser atendida.
#LibertadParaMonica La vida de Monica corre peligro inminente, ella es una de las sobrevivientes de la octava masacre carcelaria de #Cotopaxi @Salud_Ec @DDHH_Ec
DIFUSIÓN URGENTE 🚨
Abrimos HILO, COMPARTE! pic.twitter.com/gND8puY9IP— Fundación Dignidad (@EcDignidad) October 6, 2022
Asimismo, al ser trasladada sin haber sido atendida su situación se complica. La Fundación ha visibilizado que Mónica tiene implantes de biopolímeros en los glúteos, el disparo que recibió está generando derrames del líquido de los implantes. Esta grave situación puede provocar que el cuadro de Mónica termine en una inflamación, irregularidades en la piel, necrosis y hasta la muerte.
Desde la Fundación se ha cuestionado el accionar de diferentes instituciones públicas han expresado que: “No necesitamos edificios con enfoque de género, necesitamos un sistema y políticas penitenciarias. Principalmente, el SNAI”
¿Qué pasa con las mujeres trans en las cárceles?
Para Odalys Cayambe, una mujer trans activista y expresidiaria de Ecuador, líder de la Red Comunitaria Trans del Ecuador critica que los grupos de poder “dicen que toman acciones, pero aquí vemos que por ser mujer trans no fue respetada al momento de ser atendida dentro del centro, tuvo un viaje de casi 8 horas hasta el otro recinto”.
Además, resalta que la violencia que es practicada por el ejecutivo es también ejecutada por las malas prácticas del sistema penitenciario. También cuenta que a lo largo de los años las mujeres trans han sido históricamente criminalizadas.
Odalys declara que Mónica estuvo ubicada en el área de mediana seguridad de la prisión de Cotopaxi y que incluso está detenida no por un delito grave ya que tiene sentencia mínima. La activista trans también habla que no se evidencia lo que ocurre con las mujeres trans en las prisiones. Comparte que no se tratan de casos aislados sino de una situación repetitiva.
Hizo un recordatorio sobre los últimos casos de violencia contra las personas transexuales como fue el asesinato de una mujer trans en Ambato por negarse a ser extorsionada y otra mujer trans colombiana que fue “descuartizada» por no querer pagar, asimismo, las extorsiones.
Finalmente, Odalys evidencia que las activistas trans trabajan desde territorio para erradicar la violencia contra la comunidad transexual. Por tanto, enfatiza que lo que exigen es: “pagar una sentencia con dignidad”.
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