La columna vertebral del acuerdo de paz que firmaran las FARC con el gobierno colombiano que encabeza Juan Manuel Santos, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), fue ayer reglamentada por el mandatario, luego de que el 28 de junio hubiera sido aprobada por el Parlamento.
“Esta JEP con la ley que acabamos de sancionar cierra el círculo porque ya tenemos la reforma constitucional, la ley estatutaria y nos faltaban los procedimientos”, le dijo Santos a los periodistas que se acercaron a la Casa de Nariño, sede presidencial.
El dignatario remarcó el hecho de que exlíderes de las guerrillas se hubieran presentado el viernes pasado frente a este tribunal y aseguró que a partir de ahora se iría profundizando la implementación de la justicia de paz.
El viernes comenzó el “Caso 001”, donde se juzga la participación y responsabilidad de las FARC en los secuestros y detenciones forzosas entre 1993 y 2002 en todo el territorio colombiano.
“Ya hemos vistos miembros de las FARC sentados ante los jueces, dijeron que nunca iba a suceder y estamos viendo a generales de la República en la misma situación y eso es un paso importantísimo”, puntualizó el presidente.
La JEP fue creada exclusivamente para juzgar los crímenes cometidos durante el conflicto armado en el que se cometieron violaciones de los derechos humanos y otros delitos, tanto de parte de la insurgencia, como de las fuerzas de seguridad y los grupos paramilitares.
Esta justicia transicional es un nuevo modelo de reparación y judicialización que no tiene antecedentes en el planeta.
Desde el partido del expresidente Álvaro Uribe Vélez se intentó frenar esta implementación y luego vaciarla de poder con algunas reformas, sin embargo, la reforma vio la luz y se espera que el presidente electo, Iván Duque no retrotraiga un proceso que ha salvado miles de vidas en el poco tiempo que lleva la disolución completa de la guerrilla FARC y su paso a la senda democrática y política.