El número de fallecidos tras el atentado en la sala de conciertos Crocus City Hall, cerca de Moscú, ascendió a 133 personas, según informó el Comité de Investigación de Rusia.
«Durante la retirada de los escombros en la sala de conciertos Crocus City Hall, el número de fallecidos en el atentado aumentó a 133 personas. Las operaciones de búsqueda continúan», señaló el Comité de Investigación de Rusia.
De su parte, el gobernador de la región de Moscú, Andrei Boroviov, mencionó que según los equipos de emergencia que remueven los escombros, desafortunadamente la cifra de fallecidos se incrementará por la cantidad de personas que quedaron atrapadas en el recinto.
Igualmente, los servicios médicos dijeron que entre los heridos durante el atentado y que se encuentran en instalaciones hospitalarias, 44 se están en situación de extrema gravedad, entre ellos un menor de edad.
El viernes, un grupo de hombres armados, vestidos con ropa de camuflaje, desató un tiroteo en la sala de conciertos Crocus City Hall, ubicada en la ciudad de Krasnogorsk, en la provincia de Moscú, apenas unos minutos antes de comenzar un concierto de la banda rusa de rock Picnic.
El tiroteo fue seguido por un incendio, que, según el Ministerio de Emergencias, afectó un área de casi 13 mil metros cuadrados.
Se conoce que se detuvo a 11 implicados en el atentado, incluidos los cuatro atacantes que abrieron fuego contra la multitud en Crocus City Hall. Según el FSB, después del atentado los terroristas intentaron huir hacia la frontera entre Rusia y Ucrania. Kiev, por su parte, negó su implicación en el ataque.
Las autoridades de Rusia cancelaron todos los eventos masivos y de entretenimiento programados para los próximos días. También se declaró día de luto nacional por las víctimas.
Varios líderes mundiales se solidarizaron con el pueblo ruso y condenaron el ataque en términos más enérgicos.