196 unidades de policía comunitaria de Quito no funcionan 24/7. Vecinos piden respuestas a las autoridades.
Punto Noticias.- En la avenida Mariscal Sucre y calle Luis López, junto al puente peatonal de Chillogallo, la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) se convirtió en cevichería. Por eso, los pobladores de esta zona del sur de Quito se sienten indefensos, sostienen que los delincuentes deben saber que nadie los vigila.
William Basantes, presidente de la Federación de Barrios de Quito, comenta que la mitad de este inmueble se arrienda a una persona, que mantiene un negocio privado: un restaurante. “La mayor parte del lugar está arrendado para estos fines particulares. Y un espacio minúsculo, que casi no se abre, se destina a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC)”.
Néstor León vive en el sector y relata que, como la UPC de Chillogallo limita con el Distrito Quitumbe, cuando ocurren robos, los delincuentes cruzan la calle para no ser atrapados. “Los policías suelen decir que, supuestamente, no pueden hacer nada, porque allá ya es otro distrito (Eloy Alfaro)”. Basantes agrega que “es una situación anómala”, que debería ser solucionada cuanto antes.
Según el dirigente, la parroquia de Chillogallo tiene 71 barrios y, de las seis UPC que existen para controlar la delincuencia, “buena parte está abandonada”. Opina que los ciudadanos no necesitan, un policía por cada ecuatoriano”, pero sí que el Gobierno entienda que la seguridad se la debe abordar de manera integral. “Recuperar los espacios públicos, colocar alarmas comunitarias y cámaras de seguridad», son algunas medidas.
Informe preocupante
El Departamento de Planificación de la Policía Nacional, señala en un informe de abril de 2022, que el Distrito Metropolitano de Quito está conformado por nueve distritos, 92 circuitos, 258 subcircuitos, con 280 UPC y 28 UPC flotantes. En total, 7 136 servidores policiales laboran en ellas.
Sin embargo, en un informe del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana se menciona que el 70% de estas UPC se encuentran en estado entre regular y malo en cuanto a su estructura física. Muchas no cuentan con un mantenimiento en la fachada, es decir con una capa pintura, en otros casos los letreros se han deteriorado y poco visibles, y los espacios verdes lucen descuidados.
“Se evidencia descuido en el mantenimiento en general de la infraestructura, instalaciones de servicios básicos, muebles para atención ciudadana, así como también los muebles que utilizan los funcionarios policiales”, se lee en el informe.
Pero esos no son los únicos problemas. Daniela Valarezo, secretaría general de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio, en entrevista con Radio Pichincha, sostuvo que el 70% de las UPC en Quito (196) no funcionan con el modelo de gestión planificado.
No atienden las 24 horas sino casi en horario de oficina, 08:00 a 18:00. «Eso no quiere decir que los policías no trabajen las 24 horas. Las instalaciones de las UPC no están abierta las 24 horas del día. Y eso genera que la ciudadanía no tenga a dónde acudir para una atención inmediata, si es que le sucede un robo en la noche, por ejemplo”, detalla Daniela Valarezo.
El informe del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana señala que una de las causas por las que las UPC están cerradas es la falta de personal que afronta la Policía Nacional. Los policías son asignados a otros circuitos, tienen permisos o están con franco. Por ello, solo se asigna a uno o dos funcionarios. “Los mismos son quienes patrullan por el subcircuito, de manera que la UPC – UVC (Unidad de Vigilancia Comunitaria) abre esporádicamente”.
Encontraron UPC cerrada tras un asalto
Delincuentes abordaron el vehículo de Esteban B. (nombre protegido, a pedido del ciudadano), cuando viajaba con su amigo Andrés V. (nombre protegido) por el sector de Monjas, la noche del 3 de septiembre de 2022. Los asaltantes los golpearon, amenazaron y condujeron hacia Guápulo. Viéndose solos en la carretera, sacaron la radio del carro, pero terminaron activando la alarma del vehículo mientras subían por La Vicentina.
Los delincuentes se desesperaron. Frenaron en seco y uno se bajó para cortar los cables. El carro ya no se encendió. Entonces decidieron llevarse las pertenencias de las dos víctimas y se subieron a otro vehículo que los seguía.
“Lo irónico de esto es que nos dejaron frente a una UPC en La Vicentina. Nosotros fuimos a pedir ayuda. Golpeamos la puerta. Eran alrededor de las 24:00. No había ningún policía en la UPC. Estaba cerrada y nadie nos ayudó”, relata Andrés.
Esteban B., sin zapatos y golpeado, y Andrés V., sin sus pertenencias, debieron permanecer fuera de la UPC, esperando que alguien los socorriera. Entonces apareció un patrullero. Ellos le explicaron que habían sido asaltados. El policía dijo que los ayudaría. Pero nunca regresó.
“Gracias a la ayuda de los moradores de La Vicentina, pudimos llamar a un remolque para llevar el carro desvalijado. Y también nos contactamos con bancos, para bloquear las tarjetas de crédito y del banco”, cuenta Andrés.
UPC no atiende los fines de semana
En las calles Chimborazo e Imbabura, en el centro de Quito, se encuentra la UPC, que se mantenía cerrada a las 14:00 del domingo 19 de marzo de 2023. Cristian Parrales vive en el sector y dice que los fines de semana la instalación permanece con candado. “Esta zona es muy peligrosa. Y nunca hay un policía que atienda en esa UPC”.
Carlos Jaramillo también reside en el sector. Y dice que el lunes 13 de marzo, cerca de las 20:00, un ladrón le arrebató el celular al lado del UPC. “Los ladrones te roban aquí mismo. Nadie te socorre. A veces viene algún policía. Está un rato y luego se va”.
En las calles Cayetano y General Florencio se encuentra la UPC de la Colmena Centro. Al consultar a los vecinos del sector a qué hora se abre la puerta, sostienen que “siempre está con candado”. Ángel Quiñónez incluso menciona que se han dado peleas con cuchillos fuera del inmueble. “Ningún policía viene por acá. Estamos abandonados”.
Radio Pichincha se contactó con la Policía Nacional desde el 8 de febrero de 2023, para tener su versión sobre el estado de las UPC de Quito. Sin embargo, hasta la publicación de este reportaje no hubo ninguna respuesta.