Wagner Bravo advirtió que, hasta el martes, el índice de muertes violentas se redujo, pero con lo ocurrido en Quito se podría avizorar que incremente nuevamente, agregó.
Wagner Bravo, secretario de Seguridad Publica y del Estado, informó que los dos coches bomba que explotaron en las calles del centro de Quito, tendrían relación a los seis detenidos, involucrados en el asesinato de Fernando Villavicencio, quienes fueron trasladados a diferentes cárceles del país.
“Inteligencia penitenciaria hace análisis de riesgo y para preservar la vida e integridad de los seis detenidos se hizo el traslado, a fin de permitir que sigan las investigaciones”, agregó.
Bravo indicó que las repercusiones también se han dado dentro de las cárceles, de ahí que todavía existen guías penitenciarios y policías retenidos en el centro del Turi ubicado en Cuenca.
“Quieren amedrentar al Estado para evitar que sigamos cumpliendo con la función que tiene la policía y FFAA en controlar los centros”, remarcó.
En entrevista a FM Mundo, Wagner Bravo reconoció que el Estado no puede tener el control total de las cárceles, pero dijo que a través de operativos se hace un esfuerzo para retomar estos espacios y se hace control de armas y celulares.
Sobre los coches bomba, el secretario de Seguridad detalló que ya hay detenidos, los mismos que entrarán en proceso investigativo para conocer de dónde provienen las órdenes para causar terror en los ecuatorianos.
“Estamos en estado de excepción, el sistema carcelario y el resto de territorio, sabemos que puede haber repercusiones”, reiteró.
Wagner Bravo manifestó que hasta el martes, el índice muertes violentas se redujo en el país, pero con lo ocurrido en Quito se podría avizorar que incremente nuevamente.