Con la presencia del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, el Congreso de Brasil promulgó hoy la propuesta de enmienda constitucional que actualiza el sistema tributario brasileño, aprobada la semana pasada tras 30 años de debates.
El presidente Lula da Silva resaltó durante su discurso ante los parlamentarios el papel del actual Legislativo para alcanzar un consenso para la simplificación del sistema tributario.
«Ciertamente, no resolverá todos los problemas, pero fue una demostración de que este Congreso, independientemente de la postura política o partido, (…) demostró un compromiso con el pueblo brasileño», dijo.
«Este Congreso, de mujeres y hombres, de negros y blancos, tiene el rostro de la sociedad brasileña que votó en las elecciones de 2022», agregó.
El mandatario agradeció especialmente a los presidentes de Senado, Rodrigo Pacheco, y de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, claves para las negociaciones, y celebró que los Tres Poderes estuvieran en el acto de promulgación, en referencia a la presencia del presidente de la Corte Suprema, Luís Roberto Barroso.
Lula da Silva expresó que el país tiene que agradecer a Dios porque, entre tantos desacuerdos, el Congreso Nacional logró completar la votación de la reforma tributaria.
La reforma simplifica los impuestos federales, estatales y municipales, y establece la posibilidad de tratamientos diferenciados y sectores con tasas reducidas, como servicios de educación, medicamentos, transporte colectivo de pasajeros y productos agropecuarios.
La propuesta también incluye un Impuesto Selectivo, apodado «impuesto al pecado», para desalentar el consumo de productos perjudiciales para la salud y el medio ambiente, y garantiza la exención tributaria para productos de la canasta básica.
Según la reforma, cinco impuestos vigentes serán sustituidos por dos Impuestos al Valor Agregado (IVA). Uno de gestión federal se llamará Contribución sobre Bienes y Servicios (CBS) y otro con gestión compartida entre estados y municipios será el Impuesto sobre Bienes y Servicios (IBS).
El gobierno espera que con la simplificación tributaria se logre un aumento en la productividad y, en consecuencia, una reducción de costos para los consumidores y productores.
A lo largo del próximo año, el Congreso deberá votar leyes complementarias para regular la reforma fiscal.
Según el ministro de Hacienda, Fernando Haddad, los proyectos de ley se presentarán en las primeras semanas de 2024.
Xinhua