En la primera entrevista larga, otorgada a un solo periodista de una radio, el Presidente fue enfático en decir que habrá cambios drásticos en las cárceles. Que la Penitenciaria del Litoral va a dejar de parecerse al Quicentro, señaló.
«Hemos capturado a líderes de bandas estas últimas semanas, de las más importantes. De una de las bandas (de crimen organizado) que ya comunicaremos, hemos recibido hasta una solicitud de acuerdo de paz. Esta carta qué significa, que bastantes cosas estamos haciendo bien o que no tienen la protección capaz dentro de las fuerzas del orden».
En la entrevista, transmitida en la cuenta de Youtube de la Presidencia de la República, Daniel Noboa sostiene que: «tiene que empezar a existir vergüenza pública cuando un funcionario está asociado con el crimen organizado».
Así, Daniel Noboa adelantó que si por un funcionario público se suelta a un líder de una banda, lo publicarán en los diarios, en los canales de televisión, «para que la gente sepa que ese fiscal y juez a pesar de que policías y militares se jugaron la vida en esa lucha, vino y lo soltó. Debe empezar a existir la vergüenza pública de esas personas».
En esa línea, Daniel Noboa, presidente de la República, señaló que se comunicará al pueblo cuáles son los líderes de estas bandas. Criticó que cuando inclusive un narcotraficante cumple años, hasta «parece chévere ir a la fiesta de cumpleaños«.
«Que sientan vergüenza y algo así pasó en Colombia y hubo un gran cambio. Se empezó a glorificar a estas figuras y después se les sacaba la información: ‘individuo x ha querido vacunar a 50 locales comerciales, cómplice de la violación de 10 mujeres’. El momento en que la gente conozca eso no creerá que es hasta chévere subir a Instagram o Youtube que fue a ese cumpleaños del narcotraficante«.
Sobre las cárceles
«Hay un plan bonito para cambiar las cárceles. No se lo cuente a Fito (Adolfo Macías, alias Fito, líder de la banda delictiva Los Choneros) todavía. Pero desde la misma segmentación se tiene que separar, ya la Penitenciaría del Litoral va a dejar de parecerse más al Quicentro y parecer un centro de rehabilitación. El problema central está en esa Penitenciaría», sostuvo Daniel Noboa.
En cuanto a las barcazas, Daniel Noboa dijo que siempre fueron una medida complementaria y provisional, para segmentar y sacar a presos que son amenazas reales y tenerlos aislados hasta terminar la construcción de cárceles de máxima seguridad. Una barcaza puede llegar en siete u ocho meses. Muchas no están operativas o no son autónomas, tienen que ser arrastradas por otro barco. Están en Australia, Reino Unido y Estados Unidos.
«Es complejo pero más complejo es tener a todos los líderes en una penitenciaría en el centro de la ciudad más poblada del país, manejando operativos de violencia y de crimen organizado».