El fenómeno es distinto al de 1999; en este caso sin duda tiene que ver con la crisis económica heredada de Moreno y luego la pandemia redujo los puestos de trabajo, agregó.
Francisco Carrión, embajador de Ecuador en México, señaló que el país tiene la responsabilidad de disminuir el impacto penoso que está dejando la nueva ola migratoria, que es un fenómeno mundial, a través de la creación de fuentes de trabajo.
Destacó que las cifras en materia de migración no son exactas porque muchos de los ecuatorianos salen del país a escondidas, ahora mucho más con la restricción impuesta por México con el requisito de la visa, lo que pone en peligro a los compatriotas al estar en manos de los coyotes que buscan usar pasos irregulares.
“El fenómeno tiene que ser abordado de una manera integral (…) hay que abordarlo con responsabilidad y absoluto criterio humano”.
Aseveró que la movilidad humana obligada actual se parece a la ocurrida en el 99 por la oleado que se produce, sin embargo resaltó que el fenómeno es distinto porque en este caso se debe a la crisis económica heredada del Gobierno de Lenín Moreo y por la pandemia que redujo los puestos de trabajo y que ha hecho más difícil conseguirlos: “Eso lleva a la gente a ir hacia EEUU y no tanto Europa porque ese continente no está en la misma capacidad que a comienzos de siglo en cuanto a recibir migrantes”.
En ese contexto subrayó que la embajada tiene el rol de dialogar con autoridades mexicanas en defensa de los Derechos Humanos de las personas mientras se encuentren en ese país, por lo demás es ofrecer servicios consulares que garanticen sus documentos en regla.
Calificó de atinado el viaje del presidente Guillermo Lasso a México, hace unas semanas atrás, donde pudo abordar el tema de la migración y ahora en otro encuentro lo retomará: “Porque se trata de seres humanos da los cuales hay que defender sus derechos”.