El periódico británico Financial Times publicó una nota sobre la pelea que un grupo de los Noboa aún siguen en un tribunal de Londres contra Álvaro Noboa. Para su hijo Daniel, candidato presidencial, buscan incidir en las elecciones, pero la batalla lleva más de una década.
El sábado 7 de octubre, una publicación del Financial Times mostró que, al parecer, la pelea en la justicia por el reparto de la millonaria herencia de los Noboa no ha sido zanjada. En la extensa publicación se señala que se mantiene la batalla legal por el control del negocio familiar de la que el padre de Daniel, Álvaro Noboa, cinco veces excandidato y el hombre más rico del Ecuador, salió victorioso en 2010.
La fortuna de Álvaro Noboa bordea los USD 1 000 millones, según se dice. También se lo critica por no pagar impuestos, ya ocurrió en gobiernos anteriores, por lo que incluso le confiscaron una hacienda. Y actualmente mantiene una deuda de USD 88.1 millones con el SRI. Sin embargo, la fortuna la construyó el abuelo de Daniel Noboa, Luis Noboa Naranjo, quien dejó 2 mil millones que, como se ve, siguen en disputa.
Daniel Noboa, candidato que en noviembre cumplirá 36 años, asegura que sus familiares buscan interferir en las elecciones presidenciales, que se definirán el próximo domingo 15 de octubre. Pero lo cierto es que la pelea judicial lleva más de una década. El descontento del grupo de familiares no se ha superado. En juego está el control del conglomerado familiar que va del banano a la banca, como reseña Financial Times.
En el 2010, ‘Alvarito’, como se le conoció al padre de Daniel, acordó comprar los intereses de otros miembros de la familia. Ellos han seguido presentando recursos legales contra las empresas de Álvaro Noboa en Bahamas y Ecuador, argumentan nunca haber recibido los pagos acordados hace 13 años.
Incluso, señala Financial Times, después de un nuevo conjunto de acuerdos firmados en 2021, los familiares han estado solicitando pagos de las empresas de Álvaro Noboa. También han buscado que Fruit Shippers Limited (FSL), una empresa constituida en Bahamas que es el grupo holding de los plátanos Bonita, se liquide por insolvente.
En este momento, «Álvaro está enfrentado con otros miembros de la familia en una batalla en la sala de juntas que se ha trasladado a un tribunal de Londres», dice la nota.
Financial Times, además, apunta que las empresas del millonario Álvaro Noboa están solicitando una orden judicial en contra de sus familiares en el Tribunal Superior de Londres. Su objetivo es evitar que el grupo presente nuevas demandas.
A nombre del grupo de familiares, en una declaración testimonial en septiembre, Luis Noboa, sobrino de Álvaro y primo de Daniel, escribió: “Nos deben más de 10 millones de dólares desde que vendimos a Fruit Shippers Limited (FSL) nuestras acciones en 2010 junto con los derechos de herencia. . . Creemos que FSL es insolvente y estamos intentando evitar el descubrimiento de registros financieros relevantes a esta disputa, ya que demostrarán que FSL es realmente insolvente”.
¿Cómo ha reaccionado Álvaro Noboa? Las empresas de Álvaro también han contraatacado en un caso relacionado. FSL ha abierto un caso en Nueva Zelanda contra Luis Noboa alegando que recibió pagos indebidos mientras trabajaba para otra empresa independiente dentro del grupo Noboa. Luis niega esa afirmación.
Según la nota publicada, el Tribunal Superior de Londres evalúa qué proceso judicial adoptar: o un caso restringido, como el solicitado por FSL para decidir sobre la disolución de la empresa por parte de los miembros de la familia, o un caso más amplio a favor de la familia, que finalmente resolvería el monto y el calendario. para los pagos que dicen que están pendientes por su participación.
La respuesta de Daniel Noboa sobre esta pelea entre sus familiares y su padre, Álvaro Noboa, fue: «Creo que [el grupo de familiares] está utilizando [el litigio] para intervenir y afectar las elecciones en Ecuador”, a través de un mensaje de texto al Financial Times.
Ni Noboa ni su portavoz accedieron a responder sobre si la empresa familiar presentaría un conflicto de intereses en caso de ser elegido. “Mi recomendación es que no se preste atención a la interferencia electoral cuando la otra parte puede haber sido financiada ‘gris’”, añadió Daniel Noboa.