Para abordar la inseguridad es necesaria la presencia del Gobierno en el sector social, educación, salud y deporte, se trata de una intervención integral, agregó.
Carolina Andrade, experta en temas de seguridad e inteligencia, calificó como positivo que el discurso del ministro del Interior, Patricio Carrillo, haya evolucionado, al momento de abordar la inseguridad, pues finalmente se pasó del discurso político de echar la culpa al pasado a reconocer la problemática que no solo pasa por delincuencia común.
Recordó que cuando Guillermo Lasso asumió la Presidencia de la República, su primera reunión fue con el Consejo de Seguridad, donde debió tener detalles del país que tomaba en esa materia. Ha pasado casi un año, dijo, y la situación ha empeorado, sin un plan integral de seguridad donde se incluya el trabajo del sector social, educación, salud deporte y a los mismos Gobiernos Autónomos descentralizados.
Indicó que Ecuador es un país de tránsito al encontrarse en medio de países productores de cocaína, uno de ellos Colombia, nación que aumentado su producción en un 300%: “Tenemos un mercado en expansión que busca salir a mercados internacionales y ahí hay un factor determinante”.
Citó el proceso de paz de 2016 del vecino país y la falta de implementación que provocó más violencia en las fronteras, lo cual se demostró con campamentos de fosas comunes identificados en Mataje por las Fuerzas Armadas ecuatorianas en el 2018.
“Sumemos el tema de grave crisis económica que vive el país, el Ministro (Carrillo) identificó otras violencias lo cual es un buen síntoma porque se reconoce que no es tema focalizado y que se necesita intervención integral”.
Con ese panorama regional, la especialista explicó que la proyección del sistema de inteligencia y seguridad debía prever lo que significa para el país a fin de fortaelcer la institucionalidad, pero en su lugar, en el 2018, bajo políticas de austeridad y reducción de gasto público, se desmanteló todo el sistema integral.