Cuestiones presupuestarias, institucionales, geopolíticas incidieron para el aumento de la inseguridad, a decir del experto.
Punto Noticias. Cada vez es más difícil lograr el descenso de los niveles de la tasa de homicidio, porque implica esfuerzos mayores tanto en inversión como en capacidades institucionales, a criterio de Daniel Pontón, experto en seguridad y docente universitario.
Comenta que hubo un descenso dramático del índice de homicidios en el país entre los años 2009 y 2017, pero cada vez ese nivel se hacía menor.
Se sabía, dice, que algún rato la tasa iba a tener un estancamiento y fue en 2018, que coincidió con un proceso transicional (Gobierno de Lenín Moreno), en el que se cambió el modelo de gestión de la seguridad, que tienen paralelo con los eventos ocurridos en la frontera norte.
A decir de Pontón, lo sucedido en la frontera norte, donde murieron el equipo periodístico, otros civiles y militares, generó un cambio significativo en la dinámica política, institucional, operativa, doctrinaria.
Produjo que se revise el modelo institucional, que el Ministerio de Defensa tome el protagonismo que hasta entonces era de la Policía, apuntó.
A finales de 2018 se da el cambio sustancial hacia una idea nefasta de este Gobierno, modificando el modelo institucional de la gestión de la Policía Nacional, convirtiéndola en esa vieja figura anquilosada en el pasado, y el modelo de gestión de las cárceles, muy distinto a las lógicas de gobernanza y gobernabilidad del 2011, sostuvo Pontón.
Para el experto, si bien es cierto que hubo algunos factores que en la última década han incidido para que la situación del Ecuador tenga mayor afectación, en materia de crimen organizado, como la arremetida del narcotráfico, básicamente esos factores están relacionados con cuestiones presupuestarias, institucionales y, obviamente, todo un modelo de gestión de la seguridad, que tiene que ver con asuntos de geopolítica, que este Gobierno se ha encargado de impulsar.
Actualmente, advierte, la tasa de homicidios está creciendo de manera peligrosa, debido a la reacción demasiado pasiva del régimen, que tiene que ver con la forma de conducción política de estos cuatro años, que echa la culpa al gobierno anterior.
Producto de ello es la crisis carcelaria, la crisis de seguridad y todos los eventos que vivimos, cuestiona Pontón.