El exmandatario afirmó haber estado por dos ocasiones en terapia intensiva en una casa de salud de Paraguay, por lo que dice no podría viajar por más de 10 horas.
Punto Noticias.- El estado de salud y la economía del expresidente de la República, Lenín Moreno, son sus argumentos para no retornar al Ecuador y enfrentar la investigación por presunto cohecho, que pesa en su contra y de 36 personas más en el caso Sinohydro.
En una entrevista para Ecuavisa, Moreno, quien reside en Paraguay, lamentó que la Corte Nacional de Justicia (CNJ) ratificara la decisión que le obliga a él y a su esposa, Rocío González, quien también es procesada, a presentarse cada 15 días ante la Secretaría de la Sala Penal de esa dependencia judicial.
La primera presentación debía cumplirse el pasado lunes, 20 de marzo, pero debido a las acciones legales interpuestas por su abogado, la medida quedó en suspenso ese día.
La defensa de Moreno interpuso un habeas corpus y hasta un recurso de revisión para que se cambie la medida cautelar de presentación periódica. Sin embargo, en ninguno de los casos fue aceptada y -al momento- tendría que acatar la orden del conjuez de la Corte Nacional de Justicia, Adrián Rojas.
El exmandatario Lenín Moreno dijo que aunque tiene muchos deseos de volver al Ecuador, le resulta “imposible” hacerlo. Él intentaba que la justicia ecuatoriana le permitiera presentarse en el Consulado de Ecuador en Asunción y en ese lugar hasta rendir su versión sobre los hechos. Pero, el magistrado de la CNJ, Mauricio Espinosa, le negó la solicitud de habeas corpus.
Además de lo que implica económicamente viajar tres veces al mes, mientras duren las indagaciones, sostuvo que durante su estadía en Paraguay ha estado dos veces en terapia intensiva.
En este sentido, expuso que está presentando documentación, debido que le resulta imposible viajar por más de 10 horas.
Según Moreno, sus médicos le habrían recomendado no viajar en un corto plazo, peor tres veces en un mes.
“La justicia se ha transformado en una especie de una serie de Netflix”, enfatizó Moreno.
Por otra parte, reiteró que él no negoció ni intervino en la construcción de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, que estuvo a cargo de Sinohydro, empresa con la que habrían generado los supuestos sobornos que la Fiscalía investiga.
Manifestó que en esa época se desempeñaba como vicepresidente de la República y estaba a cargo de la Misión Manuela Espejo para atender a personas con discapacidad.
Durante la entrevista, el expresidente admitió que participó en el acercamiento entre el Gobierno ecuatoriano y funcionarios chinos. Y aunque se declaró perseguido, aclaró que no está tramitando un asilo político en Paraguay. Sin embargo, mencionó que todo dependerá “de las circunstancias” porque no es una pitonisa.
Sostuvo que el secretario general de la Organización de Estados Americanos OEA, Luis Almagro, le ratificó dos años más como comisionado del Secretario General de la (OEA) para Asuntos de Discapacidad. Funciones que las cumple en Paraguay.