Además si desean eliminar el beneficio a hijos de afiliados menores de 18 años se debe fortalecer la atención en salud en otros centros y acercarlos a la gente, agregó.
Cristian Castillo, investigador y docente universitario, señaló que sin duda alguna se hace necesario hacer reformas a la seguridad social, pues la esperanza de vida desde el año 2000 ha crecido en cinco años, es decir hasta un poco más de los 77 años de edad.
Mencionó que la curva de afiliaciones va a la baja, mientras hay más personas jubilándose, existen menos trabajando, de ahí que las reformas deben apuntar a la generación de empleo formal y no a entregar créditos de USD500 para adquirir una charola de caramelos y vender en la esquina.
También cuestionó la diferencia que se hace entre la seguridad social de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas con la ciudadanía en general, puesto que a los dos primeros grupos el Estado les aporte el 65% y les permite jubilarse con 20 años de trabajo: “A los 40 años estas jubilado de Mayor, por ejemplo, y reciben USD3500 hasta que se muera”.
Aseveró que cualquier cambio no debería impactar a quienes están a diez años de jubilarse: “Probablemente al resto si se les pueda incrementar la edad”.
De otro lado, indicó que para hacer cualquier ajuste el régimen debe fortalecer la atención en la salud que brindan las casas del IESS, abasteciendo de medicamentos, de personal y otros, para justificarlo.
Asimismo puntualizó que si se piensa retirar de los beneficiarios a los hijos de los afiliados menores de 18 años, se debe garantizar que esa población reciba atención en los otros hospitales y centros del sistema público.