Científicos advierten sobre el impacto de las ondas Kelvin en el clima de la región y su conexión con un posible fenómeno de El Niño más intenso.
El Centro de Monitoreo de El Niño – La Niña (ENOS) de la Escuela Politécnica del Litoral (ESPOL) ha detectado la presencia de las ondas Kelvin en las costas ecuatorianas, lo que podría ser considerado como una señal precursora del fenómeno de El Niño.
Estas ondas, nombradas así en honor a su descubridor Lord Kelvin, están generando preocupación debido a su capacidad para profundizar la termoclina, elevar el nivel del mar y aumentar la temperatura en la región ecuatorial.
Según los informes científicos de la ESPOL, durante eventos de El Niño se observa una alta actividad de las ondas Kelvin, las cuales transportan agua cálida hacia Sudamérica, incluyendo Ecuador. Además, se ha señalado que estas ondas tienen la capacidad de propagar calor alrededor del planeta, lo que podría resultar en un fenómeno de El Niño más agresivo, según un informe de la NASA.
#NMM Nivel medio del mar. 28-jun al 11-jul [14 días]. @fimcmespol
Arribo de onda de Kelvin a las costas de Ecuador. Últimos valores observados sobre el perfil costero y Galápagos: 26 a 28 cm. pic.twitter.com/Ypx1NDjFqa
— El Niño-La Niña/ESPOL (@EnosMonitoreo) July 12, 2023
El último evento de El Niño registrado en 1982-83 evidenció un incremento significativo en el nivel del mar en las costas ecuatorianas, alcanzando un máximo de 47 centímetros. Esta nueva detección de las ondas Kelvin en el perfil continental y en las Islas Galápagos ha generado preocupación entre los científicos, quienes advierten sobre la posibilidad de que se desencadene un fenómeno similar en un futuro cercano.