Todavía no hay pruebas que confirmen que Chériff Chekatt era el terrorista que mató a tres personas en la ciudad francesa de Estrasburgo. Sin embargo, como ha ocurrido sistemáticamente en todos los casos de violencia terrorista en Francia, el presunto responsable fue asesinado por la policía.
700 agentes lo buscaban desde el martes, en el que se presume que atacó a quienes participaban de mercado navideño en esta ciudad del este del país.
El Estado Islámico publicó a través de su agencia de propaganda que Chekatt formaba parte de la organización terrorista.
La policía asegura que el sospechoso abrió fuego contra un equipo de seguridad pública y tras un intercambio de disparos, murió. El ministro del Interior, Chirstophe Castaner, se acercó a Estrasburgo y confirmó que los agentes se encontraron con el presunto terrorista cuando “deambulaba” por la calle.
Chekatt tenía antecedentes penales y estaba fichado por los servicios secretos por su radicalización islamista mientras estuvo en prisión. Tenía 29 años y había sido condenado reiteradas veces tanto en Francia, como en Alemania y Suiza por delitos comunes.
La policía había ido a detenerlo a su domicilio el martes por la mañana por un caso de intento de homicidio pero logró escapar, informó AFP.