Un grupo pequeño de republicanos se opusieron a la decisión mayoritaria del Congreso, pues considera que EEUU debe centrarse en sus propios problemas.
Con 70 votos a favor y 29 en contra, el Senado de Estados Unidos aprobó un paquete de ayuda por USD 95 300 millones de dólares para Ucrania, Israel y Taiwán.
El apoyo a los tres países se dio en medio de una creciente división interna del Partido Republicano, sobre el papel de EEUU en el extranjero. Y es que un pequeño grupo de senadores de esa organización política argumentó que el Gobierno de Joe Biden debe concentrarse en los propios problemas del país, en lugar de enviar dinero al extranjero.
Ya en el momento de votación, 22 republicanos se pusieron de lado de la mayoría de demócratas y aprobaron el plan de apoyo para Ucrania, Israel y Taiwán, argumentando que si Estados Unidos abandona a Ucrania, esto podría envalentonar al presidente de Rusia, Vladímir Putin, y amenazar la seguridad de todo el mundo.
Según la Voz de América, la iniciativa tiene un futuro incierto en la Cámara de Representantes donde los republicanos de línea dura, afines a Donald Trump, son críticos a la ayuda a Ucrania.
Por ello, el miembro de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Mike Johnson, indicó que la ayuda aprobada por el Senado, podría tomar semanas o meses para que llegue a manos de Joe Biden.