Cada día, los habitantes de Quito pasan casi la mitad de su jornada laboral atrapados en el tráfico vehicular. Al menos 173 horas anuales.
Según datos de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), en horas pico, en Quito, los autos particulares circulan a un promedio de 12 kilómetros por hora, mientras que en transporte público a 8 km por hora.
Esta cifra es menos de la mitad de la velocidad registrada en Bogotá, capital de Colombia, una de las ciudades con mayor congestión de la región, donde los vehículos se mueven a 28.7 km por hora. Sin embargo, en Quito, una ciudad de forma alargada, sin buen servicio de transporte público, el tráfico ya es un problema.
El alcalde electo, Pabel Muñoz, se ha referido a este hecho, señalando su preocupación porque ya no existen horas pico en Quito.
«Nosotros transformaremos esa realidad. Quito será absolutamente productiva», ha reiterado Muñoz, en algunas entrevistas.
Las dificultades para movilizarse de un lugar de la ciudad a otro las enfrentan ciudadanos como Andrea, quien vive en Guamaní, en el sur de Quito. Desde las 06:00, ella se traslada todos los días, para llegar a su trabajo, ubicado en el centro norte de la ciudad, minutos antes de las 08:00.
«El tráfico es fatal. Me toma dos horas. A la salida son dos horas más, de regreso a casa. Tengo que tomar la Ecovía y pagar dos pasajes, para arribar lo más pronto», relató la ciudadana.
En promedio, Andrea pasa cuatro horas de su día atrapada en el tráfico vehicular. Este tiempo es casi la mitad de su jornada laboral.
«Podría usar ese tiempo para disfrutar con mi hijo pequeño, que me espera en casa», indica.
No es el único caso. Aunque Gustavo es jubilado, se moviliza para realizar sus actividades por el centro norte de la ciudad.
Aunque se traslada en auto propio para cumplir con sus actividades, tampoco encuentra mucha diferencia en el tiempo que le toma movilizarse por la ciudad.
«Circulo a diferentes horas. Ya no existen horas pico, ahora todas son horas de congestión. La clase media hacia arriba compra más autos para transportarse, y eso complica más el tráfico», reflexiona el ciudadano.
Gustavo coincide en que este tiempo que desperdicia en el tráfico lo usaría para fomentar sus relaciones familiares o para hacer ejercicio.
«Prácticamente paso fuera de casa desde la mañana y regreso cuando ya no hay un rayo de luz. Básicamente, llego solo para dormir».
Diariamente los internautas comparten sus experiencias sobre cómo se quedan atrapados en el tráfico de la ciudad.
Qué ascoooo es el tráfico de #Quito, ya no más autos, ya no máaaaas!
No ir en #bici me estresa, me daña la mente solo de ver tanto auto con un solo pasajero, colas de colas que no avanzan y todo se vuelve caótico.#Demalenpeor pic.twitter.com/xrfoXxzY8u— Gaby Rivadeneira G (@grivadeneirag74) March 28, 2023
#Quito se mueve a 3 km/hora, cuando el mundo se mueve a 16km/hora, nosotros transformaremos esa realidad. #Quito será capital de inversiones, inauguraremos el Instituto Sebastián de Benalcázar. #Quito será una ciudad absolutamente productiva.#ConPabelQuitoRenace#Debate2023 pic.twitter.com/ZeGJDbim7P
— Pabel Muñoz L. (@pabelml) January 16, 2023
Desde el punto de vista de productividad, la velocidad promedio de una ciudad dice mucho sobre ella en cuanto a la agilidad en la que los ciudadanos pueden realizar sus actividades, indica Guillermo Abad, fundador del movimiento ciudadano Justicia Vial.
Abad detalla que en la capital, cada ciudadano pierde, al menos, 173 horas anuales en el tráfico.
«Por año, cada ciudadano pierde USD 323 en el tránsito, tomando como referencia el Salario Básico Unificado (USD), que alcanza los USD 450. Esta cifra se multiplica por 1.7 millones de personas consideradas económicamente activas en el Distrito Metropolitano de Quito DMQ. El resultado son USD 550 millones de pérdida en mano de obra», explica.
Aunque este es uno de los costos más altos del tráfico, no es el único. A esto se le sumarían otros valores representativos, como la contaminación ambiental y el costo de limpieza de la ciudad.
¿La solución?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) manifiestan en sus Planes Mundiales para la Seguridad Vial 2010-2020 y 2020-2030 la importancia de organizar el transporte público.
Según estos fundamentos se deberían plantear ideas enfocadas en fortalecer este sistema en Quito, si se considera que el 70% de los ciudadanos se mueven en transporte púbico en Quito, detalla Abad.
“En un área de 18 metros cuadrados, un bus puede llevar a más de 90 personas, mientras que, en el transporte privado, un vehículo transporta máximo a seis personas”, subraya.
Según cifras de Justicia Vial: 21.6% de los ciudadanos tienen vehículo particular, pero ocupan 83% de la vía. Al menos 750 000 vehículos, entre públicos y particulares circulan en la ciudad.