Las autoridades explican que pocos locales comerciales cumplen con las normas de seguridad y los implementos contra incendios necesarios para su funcionamiento
Aunque uno de los requisitos para poner en marcha un negocio en Quito es implementar medidas de seguridad para reducir los riesgos de incendio, como la correcta disposición de los cilindros de gas, la adquisición de equipos de detección de monóxido de carbono, extintores, entre otros insumos, esta práctica no es tan extendida como se espera, y las autoridades alertan que debido a este incumplimiento por parte de la ciudadanía los reportes y llamados por fugas de gas han aumentado drásticamente en la capital, un hecho que podría generar incendios, explosiones y daños colaterales.
Así el Cuerpo de Bomberos de Quito insiste en que los dueños de locales comerciales acaten las siguientes recomendaciones: que la instalación de gas esté ubicada lejos de cualquier foco de calor intenso; que las tuberías estén identificadas por colores, y que el área de la cocina cuente con las condiciones adecuadas de ventilación, especialmente en la zona inferior a la altura del suelo para evitar cualquier riesgo de acumulación de gas y de calor que pueda desencadenar en un incendio o explosión.
Sin embargo y pese a las alertas que envían las autoridades a la ciudadanía, muy pocos locales en la ciudad acatan estas disposiciones ya que los propietarios aseguran que, para implementar todas estas medidas de seguridad, se debe destinar entre USD 800 a 1 000 y cada seis meses dar mantenimiento a los ductos, extintores y detectores. Por lo que los comerciantes al considerar que su negocio es demasiado pequeño deciden no invertir en estas seguridades.
No obstante, y según datos del Cuerpo de Bomberos de Quito, entre enero y mayo de 2022 ya se han atendido 272 emergencias por fugas de gas en el Distrito Metropolitano. De esta cifra, 13 desencadenaron en explosiones con daños estructurales y seis en incendios que afortunadamente fueron controlados a tiempo.
Las autoridades piden mayor colaboración por parte de la ciudadanía para evitar este tipo de tragedias que pueden significar una gran pérdida económica y de vidas humanas.
Para el teniente Jefferson Mera, del Cuerpo de Bomberos de Quito, la deflagración de GLP, es una de las principales causas de los incidentes que se registran no solamente en negocios sino también en hogares. Esta se produce cuando el gas está en el ambiente y hay algún punto caliente que lo activa y provoca la aparición de una llama, que en más de una ocasión desencadena en un incendio potencialmente peligroso.
Para evitar estas situaciones, el especialista pide a la ciudadanía ventilar la cocina, revisar periódicamente las instalaciones eléctricas a fin de prevenir que se genere un cortocircuito o chispazo que pueda servir como un detonante de accidentes lamentables.
Redacción Ángel Cóndor