El 25 de abril del 2023, un hombre fue secuestrado. Los delincuentes exigieron una transferencia a una cuenta bancaria de Colombia, lo que sirvió para dar con ellos.
Hace exactamente un año, un ciudadano, de 50 años, fue abordado, mientras conducía su vehículo, en Quito. Tres secuestradores, que viajaban en otro auto lo interceptaron y con amenazas y violencia física, lo obligaron a viajar con ellos. Con las manos atadas y con los ojos vendados fue trasladado a un inmueble.
La víctima recuerda que fueron las peores 48 horas de su vida. Los secuestradores lo golpearon y lo humillaron, relató a la Fiscalía General del Estado. Los criminales le quitaron el teléfono celular y de ese modo accedieron a su cuenta bancaria y supieron que contaba con USD 60 000. De inmediato se comunicaron con su esposa, para pedirle les transfiera esa misma suma de dinero.
La mujer se preocupó mucho, luego de las 22:00 al ver que su esposo no llegaba. Por lo que pidió al banco bloquear sus cuentas. Los secuestradores estaban frustrados por no poder acceder al dinero. Así que hicieron llamadas telefónicas extorsivas. Finalmente pidieron USD 1 500, que debían ser transferidos a una cuenta bancaria en Colombia.
La señora siguió las indicaciones de los secuestradores, que le pidieron acercarse a una agencia de depósito de remesas. Cuando la transferencia de dinero se concretó, los captores le informaron que liberarían al hombre, la tarde del 27 de abril de 2023, cerca de un supermercado en el sector de Nueva Aurora, en el sur de Quito.
Así, con la participación de la Unidad Antisecuestro y Extorsión de la Policía (Unase), el hombre se reencontró con su familia. Luego de un operativo, capturaron a los procesados. Además, el vehículo de la víctima fue recuperado.
El gerente regional de la empresa receptora de remesas confirmó el depósito de 1 500 dólares. Así sentenciaron a un total de cinco secuestradores, tres hombres y dos mujeres, basándose en el artículo 162, incisos primero y segundo, numerales 2 y 9, del Código Orgánico Integral Penal (COIP).
Los jueces aplicaron la circunstancia agravante del artículo 47, numeral 5, de la misma norma: “cometer la infracción con participación de dos o más personas”.
Los sentenciados fueron Andrés Alberto B. O., Óscar Andrés B. O., Jean Carlo S. L., Yoelvis Alberto R. M. y Justin José B. M.
A los tres primeros se los condenó a una pena privativa de la libertad de 17 años y cuatro meses, tras haberlos hallado culpables, en calidad de coautores, del delito de secuestro extorsivo.
Los otros dos procesados fueron condenados a cinco años y nueve meses de cárcel, como cómplices de la misma infracción penal.