Es evidente que Cáceres no actuó solo, ellos siempre actúan en manada. Además no se puede sacar el cadáver de una Institución sin ayuda, agregó,
La productora María Fernanda Restrepo destacó la sensación general de la gente respecto a las similitudes del caso de la desaparición de sus hermanos Santiago y Andrés Restrepo, con el femicidio de María Belén Bernal, pues ambos mostraron la complicidad y el falso espíritu de cuerpo de la Policía Nacional.
“El miedo que genera la Institución a “mi Teniente”, “mi Coronel” y “mi General”.
Recordó que en las primeras versiones, los cadetes que escucharon los gritos de auxilio no hicieron nada porque su superior les dijo que no se metan en temas familiares, a lo que suman las nefastas declaraciones del exministro Patricio Carrillo quien en su intento de justificar resaltó que el carro donde salía el cuerpo no fue revisado porque era de vidrios obscuros o que se debió llamar al 911 y por último calificándolo como un crimen pasional.
“Ellos no actúan solos, ellos actúan en manada, no se saca un cadáver de una Institución sin ayuda”.
Indicó que ahora la única esperanza es que la lucha de Elizabeth Otavalo no termine y que dé frutos, aunque reconoció que será difícil, pues ella junto a su padre llevan 35 años esperando por verdad y algunos de los involucrados han fallecido y otros no tienen un ápice de conciencia para hablar.
“Es un dolor y vacío eterno de angustia que aún tenemos porque no sabemos dónde están los restos de Santiago y Andrés, no sabemos la verdad ¿Quién los detuvo a la salida del partidero a Tumbaco? no sabemos toda la verdad del 8 de enero ¿Quiénes más estuvieron involucrados? porque fueron muchos, otros fueron juzgados con penas irrisorias en cárceles de lujo, amparados en un manto institucional”
Lamentó los ataques hacía la familia de María Belén que se esconden tras un teclado sin rostro y mencionó que ella y su padre también fueron perseguidos con marchas de familias de policías gritando “fuera colombianos y narcotraficantes”, esto porque se intenta desprestigiar a las víctimas.
“No solo se acaba con la víctima sino que quieren desprestigiar y derrumbar a la familia con presión psicológica fuerte de gente”.
Sostuvo que en este caso, el Estado también fue parte de la omisión porque dejaron que Cáceres salga por la puerta grande, mientras la Institución policial lo dejó entrar ebrio y hacer fiestas, escuchando gritos de auxilio sin hacer nada y luego la Fiscalía con paso lento.
Aseveró que toda víctima tiene derecho a una reparación integral que es judicial y económica: “La gente dice ya les dieron plata qué más quieren, pero los familiares de las víctimas no buscan pago, porque no hay dinero que reparen la vida de sus hijos y familiares, sin embargo es la parte fácil del Estado la reparación económica, la parte difícil es hacer justicia, en nuestro caso dónde están los cuerpos y en el caso de María Belén saber los cómplices”.