El 1 de julio de este año tendrán lugar las elecciones en México. Lejos de serenarse, el país mantiene unos índices de violencia brutales que afectan el proceso eleccionario con el asesinato en Chilapa, Guerrero de la dirigente del Movimiento Territorial del PRI, Dulce Rebaja Pedro.
La política fue secuestrada y luego asesinada junto a su primo, policía estatal. Horas antes de este crimen, el tío de la víctima también fue fusilado dentro de su vehículo y otra familiar se encuentra desaparecida.
El secuestro ocurrió luego de que la mujer participara de una protesta junto a sus familiares en las instalaciones del Comité Directivo Estatal del PRI.
La madrugada del domingo, miembros de las fuerzas de seguridad encontraron una camioneta abandonada sobre la carretera que comunica a la cabecera municipal de Chilapa con la comunidad de Atzacoaloya con dos cadáveres, el de la candidata y su primo, Crecencio Rebaja Bello.
Dulce Rebaja era precandidata a la diputación local por el Distrito 25 de Chilapa y era también directora de Evaluación y Seguimiento de la Secretaría de Asuntos Indígenas y Comunidades Afromexicanas, del gobierno de Guerrero.
Desde el PRI lamentaron profundamente su muerte.