Como un capricho político, calificó la concejala Daniela Chacón, a la intención del alcalde Mauricio Rodas, de construir el Quito – Cables, puesto que al Noroccidente de la capital no le hace falta un nuevo medio de transporte sino mejorar la calidad del que ya se tiene y reordenar las rutas.
La edil explicó que las mejoras al transporte público en ese sector tienen un costo de 20 millones de dólares mientras que el Quito – Cables alcanzaría los 44 millones, más el mantenimiento y el subsidio para que el pasaje sea conveniente.
“Y la obra está desfinanciada (…) por lo que se tiene que acudir al crédito”, añadió Chacón quien dijo que el Concejo Metropolitano difícilmente dará paso a una deuda externa para una obra que no es indispensable para la ciudad y que desde un inicio tenía problemas técnicos y financieros.
La concejal sostuvo que incluso la misma empresa que realiza los estudios sobre el Quito – Cables es la misma que fiscaliza, por lo que se registra un conflicto de intereses.
“También tenemos conocimiento de que al frente de San José del Condado hay un Club de Golf, al que se le puede expropiar unos metros en lugar expropiar de sus casas a las familias del sector”, explicó.
De ahí que dijo que tras dos años de que el alcalde Mauricio Rodas presentó la obra, en la actualidad está en tela de duda que la misma se pueda construir porque no genera beneficios a la ciudadanía.