A criterio de Wilson Araque, economista y catedrático universitario, la decisión del presidente de la República Lenín Moreno, de involucrar a la banca privada en el manejo del dinero electrónico es un buen mensaje a la ciudadanía puesto que la administración del mismo a través del Banco Central podría generar riesgos como el dejar sin respaldo a dicho sistema por la mala administración de algún gobierno.“Había riesgo porque mientras el Estado tenga recursos cumple el rol de agilitar las transacciones pero también daba la oportunidad de que cualquier gobierno venidero tome ese dinero y le dé otros manejos”, reiteró.
Sin embargo señaló que se deben emitir normas claras que regulen el servicio que brindará la banca privada pues el objetivo del dinero electrónico es de inclusión financiera y no de lucro o negocio.
“El propósito es aumentar la velocidad del dinero y reducir costos en la compra de papel moneda”, acotó el economista.
Asimismo sostuvo la necesidad de que el Gobierno explique a través de una campaña en medios de comunicación, qué es el dinero electrónico; el por qué, para qué y el cómo esto va a ser implementado, con el fin de disipar miedos por parte de la ciudadanía.
«Además el dinero electrónico lo tenemos todos, por ejemplo con las tarjetas de crédito o de débito”, recordó Araque a la vez que insistió en que el dinero electrónico será un buen mecanismo para acortar tiempos y facilitar transacciones.